Un día después de confirmarse la compra del Gran Circo, el inglés desconoce cuál será su papel a partir de ahora
El día 18 de Enero de 2017 se hacía oficial la compra de la F1 por parte de Liberty Media, después de una reunión en la que se presentaban ante la FIA sus propuestas para el futuro de la categoría, y en la que se aprobaron por unanimidad entre los miembros.
La llegada de ésta y Chase Carey como nuevo presidente de la F1 complican el futuro de Bernie Ecclestone, el cual lleva desde la década de los 70 a los mandos de la máxima categoría del automovilismo. El inglés asegura que desconoce cuál será su papel a partir de ahora, y así lo ha hecho saber mediante unas declaraciones para Press Association Sport.
“Espero que la adquisición se complete dentro de tres o cuatro semanas. Vamos a ver cómo establecemos la empresa. No es cuestión de mis condiciones, vamos a echar un vistazo y vamos a ver por qué camino les gustaría ir”.
“Estábamos en medio y cuando supimos que estas personas probablemente iban a comprar, dimos marcha atrás y pensamos ‘vamos a esperar’ porque son dueños de la compañía y depende de ellos decidir quién o qué quieren”.
Tras involucrarse en la gestión de la F1 el pasado año, Liberty Media insistió a Ecclestone para que alargara su cargo de presidente 3 años más, y durante el pasado mes de septiembre, cuando CVC vendió parte de sus acciones a los nuevos dueños, el inglés declaró que ésta le había ofrecido su continuidad como CEO.
“Eso es lo que pedían. De hecho, vamos a tratar de reunir a personas que puedan hacerse cargo de todas las cosas. He intentado encontrar a gente que lo haga, como son los patrocinadores y asuntos por el estilo. Como he dicho, vamos a ver cómo lo vamos a gestionar”
Últimamente la especulación ha crecido, y se rumorea que la empresa estadounidense quiere en el cargo al antiguo ejecutivo de ESPN, Sean Bratches, para que tome el control de marketing, patrocinio y derechos de F1, lo que significaría la marcha definitiva de Bernie Ecclestone.