Para el piloto de Red Bull la sanción es justa, un «stop-and-go» no es una sanción menor
El ganador de Gran Premio de Bakú, Daniel Ricciardo, considera que Sebastian Vettel no se fue beneficiado o con una sanción fuera de lo que le correspondía de Azerbaiján. Un Stop And go no es una sanción despreciable, considera que la acción fue mas tonta que peligrosa. La penalización de 10 segundos le parece adecuada al compañero de Max Verstappen.
«Creo que el movimiento derivado de la acción de Vettel se debe a que acabó delante de Hamilton. Nada más. El problema del reposacabezas hizo que parezca que Sebastian fue beneficiado por os comisarios. En caso de no tener problemas, Lewis habría ganado y Vettel habría quedado quinto y nadie habría dicho nada. No habría habido tanto ruido como el que hay».
El campeón de Bakú opina que no se puede tomar a la ligera una sanción similar a la impuesta al piloto de Ferrari:
«Después de la bandera negra lo peor que te pueden hacer es endosarte un stop and go. Pierdes más de 20 segundos entre entrar, salir y el tiempo parado. Otro tipo de sanción habría sido escaso me temo, como por ejemplo añadir 10 segundos a su tiempo de carrera, eso es otro tema. Lo que hicieron estuvo bien. No pienso que debiera ser descalificado. Insisto en que fue una sanción acorde con la situación».
A parte ha habido más de un comentario acerca de cuando Vettel embiste a Lewis Hamilton de forma lateral:
«No veo tanto peligro como otros, a menos de 40 km/h no veo el peligro. Creo que fue una tontería. No me parece que haya que darle muchas vueltas, como mucho que lo comenten ahora en Spielberg y ya está».
Tanto Jenson Button como Daniel Ricciardo han añadido cordura al «Vettelgate», ya que incluso la FIA ha actuado de oficio y ha tirado de las orejas a Vettel este lunes, Sebastian tuvo que dar muchas explicaciones y disculparse. Es evidente que es inadmisible, pero tampoco tendría sentido que se sancione dos veces a un piloto por algo tan «relativamente» fuera de peligro o comportamientos agresivos. En cualquier caso, quiero recalcar: no lo hizo bien. Ni mucho menos. Pero ya vale, vamos a centrarnos en el apasionante año que tenemos entre manos.