Después del mejor resultado de la temporada y un buen ensayo post Hungría, McLaren llega a una pista que no les favorece, a tratar de sacar un buen resultado en el GP de casa para Vandoorne
Llegar a Spa-Francorchamps para encarar la fecha 12 del campeonato es algo muy especial para McLaren, por tres eventos, primero el GP de Bélgica en Spa fue en donde Bruce McLaren ganó su primer gran premio para su equipo en 1968, segundo el 30 de agosto Bruce cumpliría 80 años, por lo que el equipo tiene preparada una celebración especial este fin de semana para recordar su legado, y tercero es el GP de casa de Stoffel Vandoorne.
Así que en una pista que no le favorece al motor Honda, quien por cierto fracasó en las negociaciones con Toro Rosso, y en donde será exigido al máximo, para tratar de dar los resultados que ha pedido Fernando Alonso para renovar con la escudería británica, el equipo de Woking tendrá un fin de semana que se ve complejo.
McLaren
Por lo que respecta a sus pilotos para Alonso, Spa es una pista que conoce bien y en donde ha obtenido buenos resultados en el pasado, y que espera que el descanso y entrenamiento del verano le ayuden para correr esta demandante prueba:
“¡Me encanta la primera carrera después del parón de verano! Es una gran sensación volver y sentirte descansado, relajado y con las pilas recargadas, y con ganas de afrontar la segunda mitad de la temporada. He disfrutado de mis vacaciones con mi familia y amigos, he entrenado duro y ahora estoy con muchas ganas de volver al coche”.
“Spa es increíble, es el circuito favorito de muchos pilotos. Tiene una reputación legendaria y se lo merece completamente. La sensación cuando ruedas por Eau Rouge es completamente distinta a la que tienes en cualquier otra curva del calendario. Estás tan abajo en el coche y la pendiente es tan inclinada que cuando subes solo ves el cielo, es surrealista”.
“A medida que avanza la temporada somos más y más fuertes, y espero que podamos conseguir más puntos en la segunda mitad de la temporada. Esta carrera es un reto complicado para todo el equipo, tanto los ingenieros como los mecánicos, ya que pisas el acelerador durante tres cuartas partes de la vuelta, lo que hace que sea un circuito complicado para el coche y el piloto. Sabemos que tendremos que trabajar duro para conseguir un resultado aquí pero es una vuelta larga y hay muchas oportunidades para adelantar, así que seguiremos empujando para conseguir lo máximo posible este fin de semana”.
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Por lo que hace a Vandoorne finalmente llega a su gran premio de casa, una pista que conoce muy bien, y en donde espera responder al equipo, pues hasta ahora, y aun con los problemas del auto no ha podido mejorar lo hecho por Alonso, así que este fin de semana se presenta como una oportunidad única para competir con el Asturiano y el resto de los pilotos de media tabla:
“Llevo mucho tiempo deseando participar en mi primer GP de Bélgica como piloto de F1. Es emocionante para todo piloto competir en el gran premio de su casa porque siempre es un fin de semana especial. Será fantástico recibir el apoyo de mis aficionados, y habrá muchos de ellos, al igual que mi familia y amigos que se acercarán para apoyarme”.
“Después de una primera mitad ajetreada de temporada siempre tienes ganas de irte de vacaciones, ¡pero tras unos días ya quería volver a meterme en el coche! Pero ha sido bueno tener un pequeño parón para reflexionar sobre lo que ha pasado en los últimos meses, analizar lo bueno y lo malo, entrenar duro y volver más fuerte en Spa para la segunda mitad de la temporada”.
“El inicio de la temporada ha sido muy exigente, no solo para mí pero para todo el equipo. Hemos sufrido algunos problemas que nos han quitado tiempo en pista, y creo que en mi caso he necesitado algo más de tiempo para entender qué necesitaba del coche por esos problemas. Sin embargo, últimamente se han visto los resultados del trabajo duro que he hecho con los ingenieros y con el equipo en la fábrica. Hemos visto un progreso positivo. El margen de mejora sigue siendo significante y quedan más cosas buenas por venir, así que espero que las próximas carreras sean prometedoras para nosotros”.
Así que los ingenieros comandados por Yusuke Hasegawa tendrán que trabajar horas extras para sacar el mayor potencial al motor Honda, hasta donde la barrera de la confiabilidad se los permita, sobre todo que el desempeño del motor aquí será un anticipo de las posibilidad del equipo de cara a Monza un fin de semana después, por lo que si los ensayos posteriores al GP de Hungría fueron tan favorecedores para el equipo aquí es donde hay que demostrarlo. Ya huele a F1, y eso es una buena sensación.
