Después de un gran resultado para el equipo en el pasado GP de Australia, en donde capitalizaron los problemas de Haas, para salir con el quinto y noveno puesto, aprovechando el buen manejo de Fernando Alonso quien aguanto la embestida de autos que en papel serían más rápidos que el McLaren, pero que por las características del circuito solamente se pudieron acercar al español pero sin lograr rebasarlo.
Sin embargo en el equipo saben que esa suerte no la tendrán todas las carreras y para esta carrera llegan con evoluciones al MCL33 que se retrasaron en aras de reparar las fallas presentadas en los ensayos de Barcelona, lo que al parecer fue una buena decisión.
Y es precisamente Alonso el que tras los resultados en Melbourne se ha visto más optimista con el potencial del auto, y en estos días previos ha señalado que están trabajando para pelear con Red Bull antes de lo que ellos creen, y bueno Bahréin se presta para demostrar parte de lo dicho:
“Después de un buen inicio de temporada estoy con muchas ganas de ir a Bahréin y sentarme de nuevo al volante. Australia nos ha dado buenas sensaciones y espero que podamos mantener este impulso durante estas dos carreras que vienen en semanas consecutivas”.
“Sé que el equipo está trabajando duro en la fábrica para que vayan saliendo las actualizaciones que están planeadas. Éstas, además del trabajo de desarrollo que estamos llevando a cabo en el chasís y la unidad de potencia, serán fundamentales para extraerle más rendimiento al coche”.
“No podemos dormirnos en los laureles, las carreras de Bahréin y Shanghái son exigentes para el coche y es importante que mantengamos una buena fiabilidad si queremos maximizar nuestro potencial. La competencia es feroz y tenemos que seguir empujando para conseguir más puntos”.
Por su parte Stoffel Vandoorne deberá de demostrar que el buen momento del equipo no solo es por la calidad de manejo de Alonso, sino que el auto está para que ambos pilotos puedan pelear:
“Estoy muy contento por marcharme a Bahréin después de un fin de semana positivo en Australia. El equipo tiene buenas sensaciones y estamos trabajando duro para que esto se mantenga. Sabemos que hay mucho por hacer y que en cada carrera hay una serie de nuevos retos”.
“Bahréin es una sede magnífica, es donde comencé mi carrera en la F1 cuando reemplacé a Fernando como piloto reserva en 2016, y es una carrera importante para nosotros por nuestros accionistas. El clima es bueno y el hecho de que el horario sea más tarde de lo habitual también hace que sea un fin de semana distinto”.
“Pasar del día a la noche dentro del coche es una sensación especial y hace que este gran premio sea único, también hace que sea muy distinto de Australia en cuanto a la configuración, así que quiero estar el máximo tiempo posible sobre el trazado para prepararme bien junto a los ingenieros. El año pasado tuve mucha mala suerte con la fiabilidad, así que espero tener mejor fortuna esta vez”.
Así que los de Woking llegan motivados para enfrentar dos fines de semana complicados de carrera, pero antes de pensar en China hay una carrera demandante que correr en Bahréin en donde los autos consumen aproximadamente 1.8kg de combustible por vuelta, que está dentro de los niveles altos, dos curvas (la 1 y la 14) que exigen a fondo los frenos del auto, y donde los autos circulan con una carga aerodinámica baja, por lo que la puesta a punto es compleja, y clave para el éxito en la carrera.