Comienza la actividad en pista para el cierre de este histórico triplete de carreras que hemos vivido, y que termina con el GP de Gran Bretaña, en el trazado de Silverstone.
La sesión comenzaba con noticias importantes. La primera, que Renault proveerá a todos sus coches de un nuevo turbo, que tratará de evitar problemas como los sufridos por Nico Hülkenberg en el pasado GP de Austria; la segunda, el cambio de motor para el piloto de Mercedes, Valtteri Bottas, que montará nuevos ICE, MGU-K, MGU-H y turbo, sin necesidad de sancionar por suerte para el finés.
(c) Mclaren F1
Con un día soleado como el que hacía hoy en Inglaterra, la temperatura de la pista ascendía hasta los 37ºC. En estas condiciones, los equipos comenzaban a salir con calma. El primer cuarto de hora estuvo repleto de vueltas de instalación, parrillas de sensores, piezas nuevas, como el curioso retrovisor en dos piezas de Mercedes…
Estaba todo centrado en tres factores: puesta a punto del coche, entender los neumáticos (el compuesto duro hace su estreno), y entender el nuevo asfalto del circuito.
Brendon Hartley y Pierre Gasly, pilotos de Toro Rosso, abrían la caja de los cronos, seguidos de los Red Bull. Como viene siendo habitual, tanto Mercedes como Ferrari se lo tomaban con más calma, llegando a esperar los primeros hasta media hora para marcar un tiempo.
Por suerte la actividad en pista iba en aumento, poco a poco, y gracias a ello pudimos empezar a comprobar varias cosas, como por ejemplo el uso de la tercera zona de DRS, que se sitúa desde la recta de meta hasta Farm, pasando por la rapidísima Abbey.
El piloto español Carlos Sainz pronto avisaba al equipo, esa curva era imposible con DRS abierto, y cumplida la hora de sesión, Romain Grosjean le daba la razón. El piloto de Haas perdía el coche de atrás en Abbey, golpeando las protecciones, destrozando su coche, y provocando un Virtual Safety Car.
(c) F1
Por el camino hemos podido ver como el piloto de Williams, Sergey Sirotkin tenía un susto importante en la última curva, o como Kevin Magnussen y Fernando Alonso tenían un nuevo encontronazo, con bloqueos poco elegantes y las siguientes palabras del español por radio: “[Magnussen] es un piloto muy peligroso.” Ambos tendrán que declarar por lo ocurrido.
No ha sido una sesión fácil para el de McLaren, ya que ha rodado muy poco, marcando su primer tiempo muy tarde, y además muy lejos de las futuras posiciones de Q3. Muchos problemas para los de Woking, que con reestructuración o sin ella, siguen con su Vía Crucis.
Para el final de la sesión, la dirección e intensidad del viento cambiaron, pero no pareció importar demasiado a las flechas plateadas: 1-2, con 0,5 segundos entre Lewis Hamilton (1:27.487), y el tercer puesto de Sebastian Vettel (1:27.998). Si Ferrari repite, como es habitual, la mejoría de los sábados, no están lejos, pero no pueden dormirse.
Mala sesión para los de las bebidas energéticas. Aunque Daniel Ricciardo (4º) se ha colado por delante del finlandés Kimi Räikkönen, a su compañero Max Verstappen (6º) le ha fallado la caja de cambios y ha tenido que abandonar a 4 minutos del final.
Aunque los resultados son algo caóticos, sorprenden los Sauber, con Marcus Ericsson 11º y el monegasco Charles Leclerc decimotercero. Mención de honor para Lance Stroll, que ha colocado su Williams en 10ª posición.
Bien también los Force India, con ambos coches entre los diez primeros.
Como puntos negativos, primero sorprenden las posiciones de los Renault, 16º y 18º para Sainz y Hülkenberg respectivamente, y McLaren, como en los últimos Grandes Premios, también muy atrás.
Lo segundo y no menos importante, las amplias distancias entre coches. 1 segundo entre el sexto y el séptimo, y de ahí al último hasta 1,7, casi dos segundos.
Habrá que esperar a las 15:00h, hora de comienzo de la segunda sesión, para tener más claro dónde se situará cada uno de los integrantes de la parrilla. Mientras tanto, os dejamos con la tabla de tiempos:
(c) F1
