La Fórmula 1 se está quedando sin espacio. Los pilotos ya sea con talento o respaldo económico encuentran cada vez más dificultades para sentarse en un monoplaza de la categoría reina.
Una de las atmósferas que se está viendo más afectada, es la de Mercedes. Sus jóvenes perlas no han sido capaz de asentarse en ningún equipo. La primera promesa en pisar la Formula 1, Pascal Wehrlein tuvo que marcharse al DTM debido a que no consolidó su puesto en Sauber. También es conocido el caso de Esteban Ocon, que tras la compra de su asiento por parte de Lance Stroll, ve como su futuro en la alta competición del motor se nubla.
Y si el futuro del joven francés se ve muy negro, el de la última joya del equipo de la estrella no es mucho más prometedor. George Russell, actual piloto de la Fórmula 2, centra su mirada en hacerse con el campeonato, pero sin despistarse de su máximo objetivo, llegar a la F1. El joven inglés es consciente de lo complicado que se está haciendo conseguir un puesto en un equipo. A pesar de ello, el piloto de ART, considera que puede haber una serie de soluciones para esta gran adversidad que sufren las jóvenes promesas.
Un arreglo que propone Russell es aumentar la cantidad de equipos que conforman la parrilla, de esa forma nuevos pilotos podrían aterrizar en la Formula 1 con menos dificultad. Sin embargo, George es consciente de lo complicado que conlleva crear un nuevo equipo y se suma a la propuesta de su mentor, Toto Wolff, el cual propone pasar de equipos de dos coches a tres. Una idea que a pesar de aumentar el coste de las marcas, harían un buen papel para el espectáculo:
“La Fórmula 1 actual parece que se queda corta con 20 coches en la parrilla y para un piloto joven es complicado entrar dentro de ella. La idea de un tercer coche por equipo no es mala, de esa forma habrían más puestos para los futuros pilotos. Ademas el coste no sería tan elevado. La mayoría del presupuesto se gasta en los túneles, en los salarios, en el tiempo y en el esfuerzo, no en la producción en sí. Hacer tres alas en vez de dos no conllevaría un coste adicional enorme”, explica George Russell.