Apenas un representante queda en la parrilla de aquellos pilotos que comenzaron el nuevo milenio en la Fórmula 1. Kimi Räikkönen, el hombre de hielo, es el único que se mantiene entre los integrantes de la máxima categoría del automovilismo de aquella generación de pilotos, tras la retirada, al menos, por el momento, de Fernando Alonso de la Fórmula 1.
Tantos años estando entre los elegidos, han hecho que Kimi, además de conseguir poles, pódiums y victorias, llegar a ser, gracias a su valía, campeón del mundo. Además de todo ello, su larga trayectoria le ha valido estar a un paso de conseguir el record de mayor cantidad de grandes premios comenzados. Marca que ostenta hasta el momento, otro piloto con una gran longevidad en la categoría reina, Rubens Barrichello.
Pero al piloto finlandés poco parece importarle esta marca, la cual, superaría antes de la mitad de temporada del próximo año.
“Nunca he estado persiguiendo ninguna cifra. Al final es solo un número. Al menos, no me fijo en cuántas carreras o esto o aquello. Corro porque siento que es lo que quiero hacer y cuando no lo sienta, pararé”.
Raikkönen, al que se le ve renovado en Alfa Romeo, y tras tirar de Ferrari en la segunda parte de la temporada del año pasado, parece aún algo lejos de retirarse. Pero el finlandés deja claro que no dudará en hacerlo cuando no esté motivado.
“El interés en el número es básicamente cero. Si es 10 menos que otro piloto o 10 más, eso no dicta en absoluto lo que haré. Cuando lo que siento cambie, me iré y haré otra cosa, pero así es como va a ser”.
Kimi Räikkönen parece estar en una segunda juventud en la Fórmula 1 desde el verano de 2018. Algo reforzado por encontrarse ahora en Alfa Romeo, sin la presión de Ferrari y en el equipo donde empezó.