La calificación en el GP de Mónaco ha sido por demás interesante y quizá hasta fuera de lo común. Para equipos como Renault podríamos definirla como llena de contrastes. Mientras que Daniel Ricciardo se ubica en P7, Nico Hülkenberg no ha podido pasar el corte de Q2, aún teniendo un buen set-up del auto.
El piloto alemán ha cometido algunos pequeños errores de conducción y así lo comparte:
“Me sentí muy bien con el coche, creo que había suficiente potencial para llegar a Q3. Estoy un poco decepcionado, quizá empujé más de lo que debía en algunos puntos, creo que piloté por encima de los límites aunque considero que son pequeños detalles que puedo corregir sin problemas”.
Podemos considerar a Nico como un piloto con suficiente experiencia en el trazado monegasco, así que él mismo se muestra confiado en lograr una mejor posición al finalizar la carrera:
“El año pasado conseguí sumar algunos puntos a pesar de también salir desde P11, así que eso me da ánimos. ¡Mañana me pondré los guantes de boxeo más grandes que tengo y pelearé! Gracias a la libre elección de neumáticos, tenemos algunas opciones estratégicas, así que ya veremos mañana lo que podamos hacer”
Por su parte, el australiano mantiene su sonrisa en el rostro:
“Estoy contento por como terminó la calificación, sobre todo viendo desde dónde partimos el jueves. Incluso después de la tercera sesión de libres pudimos hacer algunos cambios arriesgados en el coche que nos han funcionado bien. Dar esa vuelta de tuerca ha valido la pena completamente”.
Fiel a su estilo humilde, Daniel no tiene más que palabras de ánimo y agradecimiento hacia su equipo:
“Los muchachos han protagonizado una recuperación muy buena hoy. Podemos estar orgullosos de ellos. Gracias a su trabajo, conseguimos mantener el buen ritmo desde la Q1 hasta la Q3. Sabemos que en Mónaco eso es muy importante, la calificación cuenta mucho en esta carrera”.
Con respecto a lo que espera para la carrera del domingo, esto comentó:
“Creo que mañana puede ser un día muy interesante con algunas variables. ¡No me decepcionará despertarme con lluvia! En seco o mojado, estaré listo”.
El jefe de operaciones de la escudería francesa, Alan Permane, sabe que han hecho un gran trabajo, con una alegría en el semblante que no puede ocultar, aunque no pierde el piso por lo agridulce de las posiciones de ambos pilotos:
“La séptima posición nos tiene muy contentos, pero también creo que ha sido un día agridulce en otros aspectos. Siento que podríamos haber entrado a la Q3 con los dos autos. Nico ha quedado fuera por muy poco. En las curvas 8 y 10 bloqueó, es muy difícil conseguir una vuelta perfecta en Mónaco”.
En relación a lo que avanzaron después de un Jueves complicado, esto comentó:
“Los dos pilotos junto con sus equipos de ingenieros supieron revertir muy bien la situación para encontrar ese ritmo que el jueves nos faltó de manera decepcionante. Mañana podría llover, así que tendremos un ojo en el cielo, pero esperamos que sea una carrera limpia para que los dos coches lleguen a los puntos”.
Sin duda, Mónaco es de pilotos, y quien tiene “detalles” en el manejo es quien se queda atrás de los demás. Aquí importa menos el coche, aunque es admirable lo que los franceses han conseguido para mejorar sus posiciones y ritmo de carrera.