El mundial llega al Gran Premio de México. El autódromo Hermanos Rodríguez, que será el escenario de lujo para esta cita, presenta una de las orografías más peculiares y exigentes de toda la temporada tanto para equipos como para pilotos. Desde el equipo Williams afrontan el reto introduciendo mejoras aerodinámicas como el nuevo alerón delantero que ya montaron en los libres del Gran Premio de Japón.
Robert Kubica se muestra entusiasmado ante el desafío de pilotar en la pista de México, completamente nueva para él. A pesar de haber conducido en el antiguo trazado, nunca lo ha hecho en esta nueva configuración:
“Tengo muchas ganas de ir a la ciudad de México. Solo tuve la oportunidad de conducir el circuito en su diseño anterior para una demostración hace más de 10 años, por lo que será una experiencia nueva para mí”.
Además de no conocer el circuito, Kubica contará con menos tiempo de entrenamiento que su compañero George Russell ya que tendrá que prestarle su monoplaza durante el FP1 al piloto de F2 Nicholas Latifi. El canadiense intentará aportar a Williams información crucial para la mejora del monoplaza:
“Es un lugar único porque corremos a una altitud muy alta, por lo que el nivel de carga aerodinámica es mucho menor debido a la densidad del aire. Utilizará mi coche Latifi para el FP1, así que tendré que aprender la pista rápidamente en FP2”.
Para Russell la pista también será completamente nueva. Sin embargo el inglés se muestra motivado y con ganas de volver a competir. Apunta que el calor también jugará un papel fundamental en la carrera, además de la ya conocida altitud del trazado:
“Creo que México será un fin de semana desafiante para todos debido a la altitud del circuito, pero también al calor. Será un fin de semana interesante para mí; Es una pista que nunca he conducido, y siempre me encanta conducir nuevos circuitos. Estoy ansioso por el desafío y estoy emocionado de volver a competir”.
Dave Robson, ingeniero de carreras de Williams asegura que la pista Hermanos Rodríguez es una de las más difíciles en lo referente la fiabilidad. El motor es una de las partes que más sufrirá debido a lo complicada que se vuelve la refrigeración:
“A más de 2 km sobre el nivel del mar, el de México es un circuito complicado. La aerodinámica del automóvil se vuelve menos efectiva y, a pesar de las largas rectas, el drag es solo moderado. La refrigeración de la unidad de potencia y los frenos puede ser muy difícil, y la mayoría de los equipos pasarán tiempo evaluando las opciones durante la FP1”.
Robson ha confirmado que los monoplazas montarán el nuevo alerón delantero ya probado en Suzuka y con el que Robert Kubica quedó extremadamente satisfecho. Para intentar aportar una nueva visión al desarrollo del coche los de Grove contarán con la ayuda de Nicholas Latifi, que pilotará para el equipo en entrenamientos libres hasta el final de la temporada:
“Después de haber traído un nuevo concepto de alerón delantero utilizado en Suzuka, pasaremos el tiempo el viernes completando más pruebas y recopilación de datos. Nicholas Latifi se une a nosotros este fin de semana para el FP1. Este fin de semana conducirá el coche de Robert, y el de George en Austin. Nicholas ha hecho un trabajo extremadamente bueno cada vez que ha conducido el automóvil esta temporada, por lo que queremos obtener su impresión de las últimas actualizaciones”.