Se cerró el Gran Premio de la Toscana, y con el otra victoria de Mercedes que festejó el triunfo número 90 de Lewis Hamilton. En la Toscana, y con la carrera 1000 de Ferrari.
En una tumultuosa carrera en Mugello que tuvo 2 banderas rojas y relargadas, la flecha plateada volvió a conseguir el 1-2, siendo completado por un Red Bull, pero esta vez el de Alexander Albon.
Tras la carrera, el primero en enfrentar los micrófonos fue el propio piloto tailandés. El corredor de 24 años se subió por primera vez en su carrera a un podio de la Fórmula 1 tras haber estado cerca en varias oportunidades.
Luego de la bandera a cuadros, Albon se mostró muy conforme con el resultado:
«Es una emoción enorme, me costó mucho llegar hasta acá, es muy lindo estar en este lugar. Fue una carrera rara, pensé que iba a ser más exigente físicamente, pero mi cuerpo está muy bien.
Fue una buena pelea con Ricciardo, pero el auto tiene buenos movimientos y supo leer muy bien las curvas».
En segundo lugar habló Valtteri Bottas. El piloto de Mercedes no quedó conforme con su actuación y sus expresiones así lo indicaban, y aunque estuvo cerca de Hamilton, volvió a quedarse con el 2° puesto en Mugello:
«No pude tener el mismo ritmo de carrera que Lewis, y lamentablemente se me escapó en la segunda relargada. Voy a seguir tratando de mejorar, es fundamental para mi. Perdí muchas clasificaciones por milésimas, tengo que seguir intentando que ya se va a conseguir».
Mientras tanto, el tercero en hablar en el lugar de privilegio fue el gran ganador, Lewis Hamilton. El británico volvió a destacar el trabajo del equipo y remarcó la dificultad que le significó pelear con su compañero de equipo:
«Fueron 3 carreras en el mismo día, muy difícil mantener a Bottas atrás, entre los autos de seguridad y las relargadas, fue muy duro. Las banderas fueron las complicaciones, más allá de los neumáticos en algún stint, lo más complejo fueron esos parones.
Es una locura estar acá y ganar 90 Grandes Premios, todavía no lo puedo creer. Doy gracias a todo el equipo que trabaja a destajo para rendir al máximo».
El pequeño gran dato de esta rueda de prensa final que no gustó en Mercedes fue que Lewis se presentó con una remera particular que tapaba los sponsors y la propia marca. El británico lució una camiseta negra que pronunciaba la frase «arresten a los policias que asesinaron a Breonna Taylor».
Esta remera la mantuvo durante la premiación e incluso varios en la escudería, incluído Toto Wolff, fueron enfocados en la transmisión oficial con caras de desagrado, no por el mensaje, sino por tapar a los auspiciantes.
Hasta hace poco tiempo la FIA no permitía estas manifestaciones, y por lo visto a Mercedes también lo tomó por sorpresa. Lo cierto es que los alemanes se alzaron con una nueva victoria y cada vez reafirman más su liderazgo en la Fórmula 1.