La FIA ha empezado los ensayos con los motoristas que hay en la actualidad en la Fórmula 1 con los nuevos combustibles creados de forma sostenible que entrarán en vigor en 2025. Por ello, deberán esperar hasta esa fecha para logar que la F1 sea neutra al 100% de CO2.
El jefe de motores de la FIA, Gilles Simon confía en que entre todos los motoristas logren encontrar la manera de ser eficientes respetando el medio ambiente. Y todos lucharán con las mismas armas, es decir, a todos se la facilitado la misma cantidad de combustible (200 litros).
Simon reconocía que ellos habían fabricado ese prototipo de combustible y que funcionaba con los motores actuales, pero que necesitaban más información por parte de los equipos:
«Desarrollamos un prototipo porque queríamos descubrir por nosotros mismos qué tecnologías diferentes hay en el mercado y cómo están disponibles. El prototipo que hemos desarrollado no es perfecto, pero cumple con los requisitos físicos para un motor de Fórmula 1.
Además, este combustible aún no es adecuado para aplicaciones en los deportes de motor debido al bajo índice de octanaje. Ahora estamos en 95 octanos pero necesitamos 102 o 104 octanos. Pero nuestro objetivo son los combustibles 100% HVO (aceite vegetal hidrogenado).»
@shell
Una de las claves será en la fabricación del combustible, ya que Simon y la FIA buscan que sea lo más respetable posible con el medio ambiente. Y confía en que todos los equipos puedan adaptar sus motores al nuevo lubricante:
«Nuestro acuerdo con los fabricantes se ve así: definimos los parámetros físicos del combustible con el que se pueden operar los motores actuales. Usan su configuración estándar en sus bancos de pruebas. De esa manera, es mejor que aprendamos sobre las diferencias entre nuestro combustible y la gasolina que de otro modo usan. Diferencias en cuanto a velocidad de combustión, resistencia a los golpes, prestaciones o consumo.
No podemos esperar que la especificación inicial de nuestro prototipo produzca los mismos datos de rendimiento que los combustibles que se han desarrollado a lo largo de los años y se han mejorado cada tres meses. Recopilaremos los datos de los cuatro fabricantes, los analizaremos y sacaremos conclusiones de los 200 litros que se le han facilitado a cada motorista.»
Con ello, confían en que tanto los equipos como los motoristas puedan dar su opinión y mejorar el resultado, aunque para ello deberán esperar para conocer los primeros resultados:
«Para nosotros, se trata de conocer más sobre estos combustibles para luego determinar los parámetros de combustibles futuros y redactar regulaciones con datos comprensibles. No tenemos ninguna intención de producir gasolina nosotros mismos. El intercambio de datos es, por supuesto, delicado porque son competidores.
Queremos esperar los resultados de los cuatro fabricantes, incluido Honda. Cualquier motor de Fórmula 1 puede funcionar con este combustible sin que el motor explote. Espero alguna pérdida de potencia porque los motores no se han adaptado para este combustible.»
Por último, Simon es partidario de esperar a 2025 para introducir los nuevos motores y el combustible ya que ahorrarían costes para los equipos, cosa primordial para la F1:
«Tenemos dos opciones. Esperar hasta 2025 o llevar el combustible en 2023 y el nuevo motor dos años después. La segunda forma cuesta dinero. Porque los fabricantes tienen que hacer el trabajo dos veces. Los motores de hoy son tan especiales que imponen exigencias muy especiales al combustible. Con los nuevos motores, avanzaremos en una dirección que también se basa en la tecnología del futuro para el desarrollo de combustibles.»
