Hay algunas cosas que nunca cambian en la Fórmula 1. Está claro que Mercedes es el gran candidato a ser campeón este año nuevamente, pero por alguna extraña razón, al igual que en 2020, sienten que no están a la altura de Red Bull.
Tras los test de Bahréin, los alemanes se mostraron preocupados por el progreso de los de Austria. Si bien es temprano para poder definir cosas, las flechas plateadas tuvieron pocos giros en los 3 días. Con tan solo 304 vueltas fueron los menos participativos del fin de semana de pretemporada.
Tras el domingo en Medio Oriente, Andrew Shovlin, director de ingenieros en pista de Mercedes, destacó la preocupación ante los datos obtenidos:
«Mejoramos en el uso de combustible con mayor peso, pero no somos tan rápidos como Red Bull. Con poco combustible la imagen es más confusa, no ganamos lo suficiente y tenemos que analizar el por qué fuimos más lentos que varios.
Siempre estas pruebas de invierno nos dan material para trabajar, pero puede ser que este año sea más complejo. No tenemos mucho tiempo antes de volver aquí para la carrera, así que hemos planeado un programa de trabajo para tratar de entender algunos de nuestros problemas. Nos esperan unos largos 10 días».
Con problemas el viernes, los alemanes centraron su atención del domingo en las tandas largas con Valtteri Bottas. No obstante ya por la tarde, Lewis Hamilton mezcló cortas y largas para sacar información.
Tras los giros vespertinos, el actual campeón mundial señaló que es solo una prueba y que el 28 se verá el total rendimiento:
«Hoy hemos hecho algunas mejoras, pero todavía no estamos donde queremos estar. No puedo destacar ningún área, simplemente sabemos que debemos mejorar. Estoy deseando volver a competir y volver a ese modo de concentración.
Tengo la sensación que Red Bull estará cerca esta temporada. Se ve el progreso que realizaron y tienen un equipo mucho más competitivo. Será una interesante lucha, es todo lo que puedo decir».
Vale aclarar que a pesar de toda especulación, es real que Mercedes no se acercó siquiera a Max Verstappen. Los problemas en la batería del viernes limitaron mucho la obtención analítica de las flechas plateadas. También hay que señalar que en varias oportunidades y en prueba de vuelta de carrera, los alemanes optaron por no utilizar DRS ni la 8° marcha del auto, algo que se vio en la transmisión oficial de los test.
Por su parte, Valtteri Bottas no se mostró del todo optimista con el auto que llevaron a Bahréin:
“Todavía no estoy del todo satisfecho con el coche. Seguimos tratando de mejorar el equilibrio y hacer que el auto se comporte mejor. Debemos encontrar la manera de que sea más rápido. Con tres días de pruebas y el primer día limitado por problemas, es difícil saber dónde estamos.
No logramos los kilómetros que queríamos conseguir, pero en realidad no estuvimos tan lejos. Fuimos de menor a mayor, y el sábado casi completamos el objetivo. El domingo ya tuvimos un día realmente sólido con una buena cantidad de vueltas y ritmo decente”.
De esta forma, Mercedes con minúsculos cambios se prepara para el inicio de la temporada. Con el Gran Premio de Bahréin a la vuelta de la esquina, el campeón quiere repetir, y públicamente declara sentirse inferior.
Solo resta esperar que llegue el tan esperado 28 de marzo para saber si Mercedes puede ser destronado o si, una vez más, los alemanes solo abren el paraguas.