La temporada 11 en la carrera de Sergio Pérez ha tenido de todo. Desde convertirse en un pino derribado por Valtteri Bottas en su juego de boliche en Hungría, hasta el triunfo en su sexta carrera con el equipo Red Bull en Bakú. Sin embargo la tranquilidad llegó para sus aficionados el día de ayer al conocerse la continuidad con el equipo de las bebidas energizantes.
El viernes previo al Gran Premio de Bélgica, se hizo oficial la renovación de su contrato acabando así con las especulaciones. Y hoy tras la calificación, el mexicano se sinceró sobre el proceso para la firma:
“Me fui al parón de verano, sabiendo lo que iba a hacer. Pero obviamente todos se fueron de vacaciones y tomó un poco más estar listos. Firmé el viernes cuando todos estaban de vuelta.
Nos comprometimos hace tiempo, y hace un par de carreras que Helmut y Christian me dijeron que estaban muy contentos de conservarme en el equipo. Que no debía buscar en ningún otro lado, que querían continuar conmigo y viceversa”.
Cuando fue cuestionado sobre sus alternativas, Checo aseguró no haber sido necesario buscar fuera de Red Bull:
“Estaba claro de ambos lados que deseábamos continuar. Nunca hablé con nadie, estaba muy claro que quería continuar aquí. Era importante continuar y tener esa progresión con el equipo”.
La temporada 2022 representa un reset en la categoría con la nueva normativa. Un auto completamente nuevo, que brinda nuevas oportunidades tras el dominio de Mercedes en la era híbrida. Algo que el tapatío ve con muy buenos ojos:
“Es una gran oportunidad para mí, el próximo año todos empezamos de cero. Va a ser un concepto completamente diferente de auto. Con mi experiencia hay mucho en lo que puedo influir y aportar al equipo.
Creo que al llegar a un proyecto al final de una era, el equipo puede ver los beneficios de tener a un piloto experimentado. Viendo hacia el próximo año es muy importante contar con esas habilidades y experiencia de otros equipos.
No es un secreto que este año he batallado algunas veces con el auto para sacarle el máximo. Ahora puedo pensar en el panorama completo, algunos equipos pueden tener mayor influencia con el auto nuevo. Así que es una gran oportunidad”.
Checo cree poder adaptarse rápidamente al nuevo auto, pero por ahora aun piensa en el trabajo de 2021:
“Espero poder superarlo lo suficientemente rápido y que todo se dé más naturalmente. Dicho eso, todavía tengo mucho trabajo por hacer durante este año porque estamos peleando el campeonato de constructores y necesitamos hacer todo lo necesario para conseguirlo”.
Sobre la tranquilidad que le pudiera dar el contar con un contrato para el siguiente año, Pérez aseguró que eso no afecta a sus ganas de triunfar:
“He estado muy solo en el deporte. La única razón por la que sigo aquí es porque cada semana quiero ser mejor, quiero maximizar. No es que cuando tengo un mal día piense ‘ya tengo un contrato’.
Se está en este nivel porque estás hambriento, de otra forma no lo estaría. Así que eso no cambia nada. Es algo que probablemente te da más trabajo en el que pensar a futuro. Si tienes ya un equipo puedes ser más abierto con ellos y viceversa. Tener esas habilidades es lo que ayuda básicamente”.
Y cuando señalaron que las cosas malas le pasan a él y no a Max Verstappen, insinuando una tendencia por parte del equipo, el mexicano se limitó a responder:
“Son cuestiones del deporte, para ser honestos”.
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