Los problema para la fábrica de Borgoña Pagnigale no han dejado de crecer con un mundial en juego que poco a poco se va esfumando para el italiano: «Al final estuvimos luchando mucho durante el fin de semana, especialmente por la temperatura, pero en la carrera la situación fue un poco mejor. No lo suficientemente buena como para tener el mismo ritmo que los pilotos más rápidos. Pero al final, todavía estamos allí. El campeonato sigue abierto. Es difícil y duro porque son realmente fuertes y rápidos en todas las pistas, pero espero y creo que si las condiciones mejoran, tendremos el mayor margen de mejora. Todos serán más rápidos, seguro. Será un fin de semana complicado como cada doble carrera en la misma pista pero al final hay que seguir soñando y seguir trabajando”.
Tan solo una carrera ganada este año y cero a sus espaldas. «Al final para mí ha sido una temporada extraña y diferente en comparación con estos pilotos. Nunca había sido tan fuerte como para pensar en el Campeonato, pero al final, estoy allí, y esto es muy importante. Aún así creo que lo hemos hecho. Nuestra oportunidad, pero es difícil como dije antes. Ganamos una carrera, pero en las otras carreras las sensaciones no eran tan buenas, así que es difícil luchar por el Campeonato en esa situación en la que estamos, así que creo que usaremos nuestro cartas hasta el final«.
Vista a futuro: “Con la experiencia de la carrera del pasado domingo en MotorLand creo que podemos aspirar a más el próximo fin de semana. Tenemos todavía muchos datos por analizar para entender como gestionar mejor el consumo de los neumáticos, que seguramente volverá a ser determinante. Si trabajamos en la dirección correcta estoy convencido que seremos más competitivos, porque aún tenemos potencial. Esperamos poder aprovechar todos los entrenamientos desde el viernes con condiciones normales, de esta manera llegaremos más preparados al domingo. Quedan cuatro carreras y no estamos tan lejos de nuestro objetivo. Aquí no se rinde nadie”, declaró.