Hay días que más vale olvidar rápido. Y sin lugar a dudas, para George Russell, hoy será uno de ellos. Y eso, que tras los halagos de ayer provenientes de Fernando Alonso, el domingo parecía pintar bien.
La verdad, incluso durante gran parte de la carrera, todo parecía indicar que el Gran Premio de la Emilia Romagna seria fantástico para el piloto de Williams.
Tras una buena y agresiva salida, el desempeño que tenía en la carrera le encaminaba a posiblemente lograr al menos, tocar con la punta de los dedos, el primer punto de la temporada tanto para él, como para el equipo.
La salida del Safety Car tras el abandono de Max Verstappen, parecía venirle bien a Russell. El británico era 10º y sabiendo lo complicado que es adelantar en Imola, las perspectivas no podían ser mejores.
En ese momento, Russell era justo el primer monoplaza tras el Safety Car. Pero justo cuando intentaba calentar sus neumáticos duros tras el safety, ha perdido el control de su coche, y ha acabado besando el muro y verse obligado a abandonar.
Tras el accidente y mientras su monoplaza estaba siendo retirado, George ha estado sentado en el césped, lamentándose por su terrible error. Nada más llegar al box, Russell se disculpó con el equipo, y poco después de regresar al paddock publicó un mensaje en Twitter diciendo: «No sé qué decir. No hay excusas. Lo siento mucho chicos».
Cuando ha sido preguntado, sobre so hoy era el día para lograr un punto, el británico, no sabía que decir:
«No lo sé. Quiero decir, que hoy no podía cometer errores estúpidos como lo hice hoy si quería puntuar.»
El británico ha sido muy agresivo hoy, y cree que si quería sumar, tenía que seguir siéndolo hasta el final:
«Fue una carrera en la que estuve presionando todo lo que pude desde la primera vuelta hasta entonces, la más agresiva que he tenido. Quería continuar con eso bajo el coche de seguridad porque sabía que con los muchachos detrás de mí con los neumáticos nuevos y yo con los neumáticos viejos, si tenía alguna posibilidad de conseguir un punto, tenía que ser súper agresivo.
Obviamente, tan pronto como perdí el auto, ya estaba en la pared, y estaba destrozado. Obviamente lo siento mucho por todos los muchachos».
A pesar de todo lo ocurrido, Russell prefiere quedarse con lo positivo del día de hoy:
«Lo positivo es que estábamos en esa posición por mérito. Me las arreglé para pasar a Ocon, y me alejé de él. En la primera fase de la carrera, estaba al mismo ritmo que los McLaren. El coche estaba vivo este fin de semana, y fue muy, muy rápido.
Estoy seguro que vendrá el primer punto. Creo que entendemos cada vez mejor el coche, semana tras semana. Mis primeras vueltas han sido malas, y probablemente hice un movimiento bastante audaz y agresivo con Sebastian Vettel en la primera curva.
Y como digo, siento que a veces he sido demasiado conservador en las carreras. Y definitivamente encontré el límite hoy».