Con un nuevo Campeonato de Constructores entre el bolsillo el equipo Mercedes llega a Turquía a ratificar su hegemonía. Con la tarea hecha, los de Brackley no se relajan y encaran la recta final de la temporada dispuestos a no dejar nada a sus rivales.
Mercedes está marcando una época, que saben de sobra que será recordada durante mucho tiempo, y que pasarán mucho años, antes de que alguien logra ni tan siguiera acercarse. A pesar de todo ello, quieren seguir marcando el camino de la Fórmula 1.
Toto Wolff, jefe de la escudería, destacó que lograr 7 campeonatos de constructores consecutivos es un logro del que están orgullosos y reconoció que la celebración se extendió hasta la fábrica:
«Es un logro sin precedentes en la Fórmula 1 y en el mundo deportivo en general. Nos aseguramos de que todos tuvieran un momento la semana pasada para conmemorar el resultado de manera segura, ya fuera desde sus casas o en la fábrica».
Tras el doblete en Imola, matemáticamente solo Lewis Hamilton y Valtteri Bottas pueden ser campeones. El británico tiene la primera opción y podría asegurar su séptimo título mundial en el Istanbul Park. Si Bottas tiene un fin de semana perfecto, podría retrasar la coronación.
El jefe de Mercedes, y a pesar de tener casi todo el trabajo y los objetivos cumplidos, apunta a que en estos últimos cuatro GP el equipo no se quedará de brazos cruzados y seguirá trabajando a tope:
«El resultado en Imola también significa que sólo Lewis y Valtteri siguen compitiendo por el Campeonato de Pilotos. Se lo debemos a ellos dos y a nuestros aficionados. Queremos terminar la temporada con estilo, por lo que seguiremos presionando y daremos lo mejor de nosotros en estas cuatro últimas carreras».
Wolff destaca que tienen poca información del trazado, lo que abre muchas posibilidades. El austriaco destaca la capacidad de adaptación del equipo:
«La F1 regresa a Turquía por primera vez en nueve años. Lo que significa que una vez más nos enfrentaremos a una serie de incógnitas sobre la pista. Ya hemos demostrado tanto en Imola como en Portimão que podemos adaptarnos rápidamente. Eso es algo muy importante en una temporada en la que estamos corriendo en muchos sitios que normalmente no visitamos.
La pista de Estambul tiene zonas desafiantes y excelentes curvas, como la famosa Curva 8; estoy impaciente por ver cómo se comportarán los coches de 2020 allí».