Como ya os hemos informado, el próximo jueves tendrá lugar una reunión de la comisión de la Fórmula 1. En ella se van a plantear diversos asuntos, como por ejemplo la posibilidad de tener carreras cortas los sábados ya este 2020, ( Jueves 11, fecha clave para votar el experimento de las carreras sprint en la F1 ).
Pero entre ellos, hay uno que se me antoja de vital importancia para el futuro a corto plazo de la categoría. El tema de la congelación de motores a partir de 2022. Sin duda alguna esta es una decisión vital por muchos aspectos. Pero hay uno muy importante. El futuro de Red Bull y su equipo «B» AphaTauri.
Recapitulemos un poco. Desde que Honda anuncio su salida de la Fórmula 1 al final de esta temporada, existe una gran preocupación por saber quién motorizara a Red Bull y AlphaTauri. Los de Milton Keynes no quieren ser motorizados por ninguna de las posibilidades existentes Ferrari, Mercedes y sobre todo Renault.
En Red Bull ya han dejado claro varias veces, que su opción preferida sería comprar los diseños de la unidad de potencia de Honda para seguir utilizándola más allá del 2021. De hecho ya existe un acuerdo con los japoneses para poder lograrlo.
Pero para ello, se necesita que se apruebe una congelación en el desarrollo de estas unidades de potencia a partir de ese 2021. Si no, amenazan incluso con dejar el gran circo.
Tras una primera negativa por parte de varios equipos, y semanas de negociaciones, hace pocas jornadas, parecía que se había conseguido un consenso entre las diferentes escuderías para esta congelación.
Pero poco después, este consenso salto por los aires, como afirmo Helmut Marko:
“La buena voluntad que estaba allí el viernes pasado desapareció repentinamente el lunes. Obviamente, la competencia está ganando tiempo. Mercedes, Ferrari y Renault no necesariamente quieren ayudar a Red Bull con una decisión rápida”.
Pero ahora ya no se puede alargar más esta decisión. Red Bull y Honda deben conocer ya que ocurrirá más allá de esta temporada. Y para eso, el jueves 11 debemos saber algo.
2022 será un año complicado para todos. Deben llegar las nuevas reglas ya aplazadas este año, y todo aun en medio de todo lo derivado por la pandemia del COVID19. Peor en Milton Keynes no pueden esperar más a saber que deciden el resto de equipos. Seguramente, incluso ahora ya es un poco tarde para ellos. Pero en el caso de un voto afirmativo, el problema sería menor.
El actual CEO de la F1, Stefano Domenicali, ya ha dejado claro que está a favor de la congelación a partir ya de 2022 y no esperar un año más como estaba previsto:
«Queremos anticipar la congelación porque queremos ahorrar dinero para que los fabricantes y los equipos puedan invertir en el nuevo motor. Las discusiones que están en marcha van en la dirección correcta. No quiero anticipar nada, pero confío en que todo el mundo entenderá la importancia de que estas cosas ocurran.»
Veremos qué pasa. Como es lógico, cada uno mira por su bien persona. Los que tienen ventaja, quieren conservarla. Y los que van atrás, quieren poder evolucionar su motor para alcanzarles. Y en medio esta Red Bull