Con sólo una carrera y día y medio de test a bordo del auto, Sergio Pérez estuvo a punto de ni siquiera arrancar el GP de Bahréin por un problema eléctrico. Ya todos vimos la forma en que el mexicano consiguió encender todo el auto justo a tiempo para arrancar desde el pit lane. Un debut que ha dejado buen sabor de boca en casi todo el mundo, incluyendo a todos en Red Bull.
Ahora estamos a un escaso día para que inicie oficialmente la actividad en pista del GP Made in Italy e dell’Emilia Romagna (su nombre oficial), nada más y nada menos que en el histórico circuito de Imola.
Luego de que el propio Checo ha dicho que le dieran 5 carreras para tener completa adaptación al equipo y al auto, nos da sus impresiones de cómo va todo este asunto hasta ahora:
“Va bien. Considerando la corta y limitada cantidad de pruebas que tuvimos. Normalmente tenemos tres días, pero esta vez contamos sólo con día y medio. Cuando consideras la cantidad de cosas aerodinámicas que hay que entender, el tiempo es realmente poco. Bahréin ha sido un lugar único, pero las cosas están llegando. Creo que cada kilómetro marca una gran diferencia.
Cuando vienes del exterior y lo experimentas es un impacto muy poderoso. Te das cuenta de por qué el equipo tiene tanto éxito y también de la mentalidad que tienen. No tienen que ser extremadamente estrictos para concentrarse, pueden estar relajados, pero también entregando los niveles máximos. Es algo que Red Bull hace de manera única en el deporte”.
Laurent Charniaux / Getty Images / Red Bull Content Pool
Con la experiencia que le dan 10 años dentro de la Fórmula 1, Pérez no cree que sea quién para decir lo que ha aportado hasta ahora, sin embargo, conoce y sabe lo que puede entregar:
“No soy la persona adecuada para responder eso, pero creo que, obviamente, la experiencia y una cultura diferente. Las formas de sacar el máximo provecho de la carrera o del coche a lo largo de la temporada y desarrollar el coche en el futuro. Ese valor también es muy importante en el equipo”.
La situación de perder la salida en Bahréin ha sido una de las que más han llamado la atención por como sucedieron las cosas. Para Sergio esto ha sido un buen resultado, tomando en cuenta estas circunstancias. Así lo describe:
“Salvamos un par de puntos para el equipo, que era muy importante para meterlos en el bolsillo. Y también conseguimos anotar esos kilómetros, porque cada kilómetro cuenta. Mirando los datos, estoy dando grandes pasos y sé dónde me falta tiempo de vuelta. Puedo ver dónde puedo mejorar.
Salir desde atrás no es sencillo. Siempre estás en una estrategia distinta a la de tu compañero de equipo, lo cual es una buena referencia. Pero estás conduciendo una carrera muy diferente a todos los demás. Tienes que manejar los neumáticos mucho más de lo que realmente quieres y pasas mucho tiempo en el tráfico. No es lo ideal.
Sin embargo, los puntos son muy importantes, y aprovechar al máximo un mal día es lo que hará que nuestro campeonato sea exitoso”.
Hablando de su compañero, Checo ha sido claro que como compañero y como rival es un tanto diferente:
“Como compañero lo conocerás más de cerca, verás como trabaja y qué hace dentro y fuera del coche. Como rival, sólo lo ves en la pista y eso es todo. Puedes ver que Max es un piloto muy talentoso y muy natural también”.
@RedBullRacing
Con respecto a la próxima carrera y llegar a Imola aun aprendiendo, el mexicano habla con honestidad de lo que significa y espera este fin de semana:
“No es mi pista favorita, pero sigue siendo una que disfruto. Desafortunadamente, la carrera no es tan interesante para los fanáticos si es normal. Sin un coche de seguridad, puede acabar siendo una carrera única y aburrida para los aficionados. Ojalá estemos ahí en la mezcla desde el primer día en adelante y podamos dar otro paso en la dirección correcta.
Estamos progresando y tenemos un coche muy competitivo, así que los queremos a los dos delante. Mi objetivo sigue intacto. Maximizar el potencial del automóvil, ponerse al día lo antes posible y entregar fin de semana tras fin de semana”.
Las expectativas sobre si Red Bull conseguirá la hazaña que no pudieron en la carrera pasada son muy altas. Sergio deberá tener una buena clasificación para poder afrontar la carrera de la manera correcta. Imola es un circuito donde es casi imposible adelantar. Como dato, el año pasado, sólo se registraron 6 adelantamientos.
Este año, la zona de activación del DRS se ha adelantado para dar mayor distancia a la oportunidad, pero el ancho de la pista siempre será más importante en un circuito de la vieja escuela como éste.
Esperemos que las cosas le funcionen a los de Milton Keynes y consigan los resultados esperados.