El Gran Premio de Arabia Saudí fue sin duda uno de los más entretenidos de la pasada temporada. En gran parte, por ser el penúltimo episodio de la encarnizada lucha por el título entre Max Verstappen y Lewis Hamilton. Pero también, por la espectacularidad del trazado del circuito de Jeddah, el cual no quedó exento de criticas que lo tildaban de excesivamente peligroso. Por ello, antes del mes de marzo, se van a llevar a cabo modificaciones para incrementar la seguridad.
El CEO del circuito Martin Whitaker ha asegurado que estos cambios tendrán como objetivo mejorar la visibilidad para los pilotos desde los monoplazas. En ese sentido, se modificarán algunos cambios en el trazado en las secciones más rápidas para aumentar la seguridad:
«Nos hemos esforzado por mejorar en algunas áreas para nuestro segundo evento. En primer lugar, habrá uno o dos pequeños cambios en la pista. Estos ajustes están directamente relacionados con la línea de visión de los conductores desde el cockpit. Es un trabajo mínimo, pero ayudará a mejorar la visibilidad hacia adelante en un par de curvas”.
También se llevarán a cabo modificaciones en las barreras y protecciones de seguridad para favorecer las trazadas de los pilotos. Y no solo de ellos, también de los espectadores:
«En segundo lugar, haremos algunos pequeños cambios en las barreras que favorecerán las líneas que toman los conductores alrededor del recorrido. Hay un par de áreas en las que estamos trabajando para mejorar la experiencia de los fans que regresen a la pista en marzo”.
@ValtteriBottas
La visibilidad también era un problema para los aficionados en alguna de las gradas. Para mejorar toda la experiencia, Whitaker ha asegurado que se mejorarán los espacios dedicados a los fans. El poco margen de tiempo con el que se contaba para construir el circuito antes de finales del pasado noviembre hizo que estos no se llevasen a cabo de la mejor manera posible:
«Estamos planeando cambiar algunos de los ángulos de las gradas para mejorar la visibilidad. Y, al mismo tiempo, planeamos aumentar el tamaño y desarrollar las Fan Zones, que demostraron ser extremadamente populares. Tuvimos que tener todas las instalaciones listas en un corto espacio de tiempo. Pero ahora, con esta pequeña diferencia con respecto a nuestra segunda carrera estamos mejor posicionados para comprender nuestras limitaciones”.
El espectacular escenario en el que se enmarca el circuito de Jeddah, a orillas del Mar Rojo, no deja muchas posibilidades para modificaciones. No obstante, la cita de noviembre también puso de manifiesto las dificultades para llegar en coche hasta el circuito. En ese sentido, Whitaker ha explicado que se encuentran valorando soluciones:
“Debido a nuestra ubicación, no podemos cambiar demasiado porque la pista está ubicada en una estrecha franja de tierra junto al mar. Pero ciertamente estamos mirando la entrada y la salida del circuito. La gestión del tráfico era un problema y había características del sistema de carreteras que generaban retrasos innecesarios. Tenemos tiempo para resolver estos aspectos para asegurarnos de que todos los que regresen tengan una experiencia igualmente buena, si no mejor».
Habrá que esperar todavía dos meses para ver si estos cambios convencen a todos aquellos que alzaron la voz por la peligrosidad del circuito.