Ante la cancelación y el aplazamiento de los primeros Grandes Premios de la temporada a causa de la pandemia del coronavirus, la Fórmula 1 ha tomado una decisión: suspender el parón de verano y trasladarlo a los meses de marzo y abril.
De esta forma, la paralización de las actividades relacionadas con los coches y la competición que tiene lugar durante, generalmente, dos semanas en agosto, aumenta a 21 días y se traslada a los meses tercero y cuarto del calendario.
Con esta medida la competición deja abierta la opción de colocar algunas de las citas del calendario durante el mes de agosto y, además, al obligar al cierre a todas las escuderías, minimiza la desventaja con la que Ferrari iba a comenzar este año la temporada, ya que los italianos ya se habían visto forzados a parar desde el lunes debido a problemas con la cadena de suministro.
La FIA ha hecho pública la decisión de adelantar el parón de verano con un comunicado, en el que se puede leer:
“Debido al impacto global del COVID-19, que actualmente afecta a la organización de los eventos del Campeonato Mundial de Fórmula 1 de la FIA, el Consejo Mundial de los Deportes de Motor ha aprobado un cambio en el Reglamento Deportivo de la Fórmula 1 2020 que traslada el periodo de cierre de verano de julio y agosto a marzo y abril y lo extiende de 14 a 21 días”.
“Por lo tanto, los competidores deben observar un periodo de cierre de 21 días consecutivos durante los meses de marzo y/o abril”.
“Este cambio fue apoyado por unanimidad tanto por el Grupo de Estrategia de la F1 como por la Comisión de la F1”.
Mediante este cambio la categoría trata de adaptar su calendario a las circunstancias internacionales generadas por el coronavirus. Recordemos que, aunque les costó cancelar en GP de Australia, aquí lo verdaderamente importante es la salud de los integrantes de los equipos, los aficionados y la población en general.