La «silly season» de este año sigue siendo prematura, pero en Ferrari confían que el alemán seguirá con ellos
A vueltas con los pilotos para 2018. Los comentarios no paran, aliñados por el fin del contrato de varios pilotos en activo actualmente. Sin olvidar que Kimi Räikkönen no va a pilotar eternamente, o Felipe Massa (que ya se había retirado), y que Fernando Alonso no deja de hablar de sus numerosas puertas abiertas.
Sebastian Vettel está en forma, se echa el equipo a las espaldas cuando es preciso y, además, no deja de intentar que Kimi alcance el nivel más alto posible, comparte telemetría y siempre le defiende públicamente, pese a que la carrera de Mónaco sirvió para que muchos insinuasen una fractura insalvable en la Scuderia. No estuvieron esos medios igual de sutiles cuando Seb y Kimi sonreían y jugaban contentos en la «Partita del Cuore», un acto benéfico en Italia.
Este año Sebastian está muy centrado, muy potente, líder con 25 puntos sobre Lewis Hamilton, dando a Ferrari un nivel que parecía olvidado, y los italianos no quieren perderle. Mattia Binotto, director técnico, tiene plena confianza en que contarán con el piloto alemán más allá de este año:
«Vettel corre con nuestro equipo, es un tetracampeón del mundo, y estoy convencido de que seguirá con nosotros. Nada supera para un piloto ganar con Ferrari».
Binotto ha afirmado esto durante la celebración del Trofeo Bandini, en declaraciones a Motor Sport. Pero no parece que haya «descubierto América», Seb está en forma y Ferrari también. Se muestran como un equipo sólido y su rendimiento en pista ahora está fuera de toda duda, aunque en Mónaco Ferrari se vio favorecida por su distancia entre ejes, este fin de semana en Canadá podremos comprobar si los Mercedes consiguen el ritmo al que nos han acostumbrado.
Ferrari es un equipo mítico en la Fórmula 1, es un binomio inseparable, o al menos hasta ahora lo ha sido y es la esencia de la más alta competición del motor. Ese piloto alemán ha devuelto la ilusión a los de Maranello, como ya hizo otro antes, un tal Michael Schumacher. No se pueden comparar épocas, no es justo, pero es inevitable ilusionarse y en Ferrari y en Italia lo saben.