El finés se mostró con una actitud fría cuando Alonso se interesó por su estado.
Kimi Räikkönen dejó claro otra vez porque es el hombre de hielo. Todo ocurría en la primera vuelta del Gran Premio de Austria, cuando Fernando Alonso intentaba el adelantamiento por el lado izquierdo del Ferrari, que empezó a derrapar en cuarta marcha sin control alguno. El accidente resultó catastrófico, pues el piloto de McLaren acabó encima del SF15-T de Kimi. Ambos pilotos salieron ilesos del percance aunque el español deberá cumplir otra sanción de 25 posiciones en Silverstone confirmando la rotura de motor del MP4-30. Contratiempo considerable para la escudería, que ya modificó el monoplaza para cumplir todas las sanciones en Austria y llegar limpios a Gran Bretaña, pues el nuevo motor no duró ni una vuelta.
La polémica se desató tras el accidente. El asturiano, al bajarse del monoplaza, preguntó al piloto cómo se encontraba. Räikkönen no respondió con mucho entusiasmo. Se puede entender que el de Ferrari estuviera disgustado con su situación y por ese motivo no haber aceptado del todo las disculpas del español. Pero Fernando lo intentó de nuevo en el «corralito», interrumpió su entrevista para disculparse de nuevo ante todos los medios. El piloto de McLaren se acercó a Kimi con el mismo propósito, un propósito que de nuevo no se ve cumplido como se esperaba.
Aunque ningún piloto resultó sancionado, los usuarios en las redes sociales se encargaron de ejercer de comisarios y sacar sus conclusiones. Algunos les echaron las culpas a Alonso por su «ansia de adelantar» y otros lo hicieron con Räikkönen, ya que la pérdida del control de su coche le ha costado al de Oviedo la carrera. Con nuevo motor y otra vez sin rodar y sin obtener información preciada. Los fans del español se mostraban molestos por el feo gesto del finés. Algunos aficionados defendían el comportamiento del español, pues no tenía ninguna obligación en disculparse ya que la culpa no fue de ninguno.
«Me dispuse a adelantarlo pero (Räikkönen) perdió el control del coche e impactó contra mí, yéndonos contra el muro», respondió Alonso sobre el accidente.
Con Kimi Räikkönen no es la primera vez que nos muestra una actitud de este estilo. El actual piloto de Ferrari es admirado -o odiado- por su particular manera de ser. A lo largo de sus 13 temporadas en Fórmula 1, Räikkönen nos ha mostrado su poco interés por la prensa, pues está claro que él sólo viene a correr. También nos ha regalado momentos peculiares, como ausentarse en el himno de los Estados Unidos antes de la celebración de la carrera en 2014, ordenarle a su ingeniero que le dejase en paz durante el GP Abu Dhabi 2012 y decirle que ya sabía lo que estaba haciendo, o en medio de una bandera roja durante el GP Malasia 2009…
Así es Kimi Räikkönen y aunque parece que este año está cambiando su actitud, sigue siendo el mismo.