La marca de neumáticos italiana culpabiliza a sus compatriotas por utilizar un excesivo número de vueltas del compuesto medio en la carrera de ayer en el Gran Premio de Bélgica.
A menos de cinco vueltas para finalizar los 43 giros en el circuito de Spa-Francorchamps, todavía estaba la lucha por la tercera plaza del podio que mantenían Sebastian Vettel y Romain Grosjean, ya que el francés venía recortándole distancia al de Ferrari sector tras sector con los neumáticos blandos. Hasta que el alemán, que sólo llevaba una parada, nada más cruzar Eau Rouge se le reventó el neumático trasero derecho y le impidió finalizar la carrera.
Tras las declaraciones de ayer del tetracampeón del mundo, puede que por culpa de la frustración de no haber logrado un nuevo podio, los de Pirelli han salido a defenderse a sí mismos.
«No se escuchó la solicitud que hicimos hace dos años para fijar un límite máximo de las vueltas que podían hacerse con cada juego de neumáticos«.
Aseguran que hace dos temporadas tuvieron una reunión por la duración de los compuestos en el que la petición fue denegada y los italiano planteó otra propuesta que resultó ser el definitivo.
«En noviembre de 2013, Pirelli solicitó que debería existir una normativa para controlar el número máximo de vueltas que podían hacerse con un mismo juego de neumáticos, entre otros parámetros, para asegurar su correcto uso. Esa solicitud no fue aceptada. La solicitud proponía una distancia máxima del 50% del Gran Premio para el neumático más duro y un 30% para el más blando. Aplicadas a Spa-Francorchamps, el máximo de vueltas posibles con el neumático hubiera sido limitado a 22”.