El australiano se muestra muy contundente respecto a la situación actual a la que está envuelta la categoría.
En estos días, el ex piloto de Fórmula 1 y actual competidor de Le mans fue muy sincero reflexionando sobre el camino que lleva el «deporte», muchos aspectos en la que muchos estarían totalmente de acuerdo. Hace referencia que la máxima categoría va decayendo por «falta de calidad».
En primer lugar, todos sabemos quiénes son los pilotos de pago que están en la parrilla, y como aportación «el dinero no da calidad», eso no lo sabe ni Maldonado ni Gutiérrez, ni muchos otros. Estos «pilotos» no llegaron a la Fórmula 1 por destrezas, habilidad o espíritu ganador, son unos que traen patrocinadores debajo del brazo y como la situación económica de algunos equipos es nefasta, entran en juego.
Maldonado… es el centro de las miradas en cada Gran Premio, normal. Pastor llega al equipo Lotus en sus peores momentos, ¿para competir? No, para salvarles (quizá el año que viene no está en Lotus, o en la Fórmula 1). Es uno de estos protagonistas que no aporta al deporte, sino todo lo contrario. Con el caso de Esteban Gutiérrez fue fichado por Ferrari, ¿no se sabe para qué? Porque a Ferrari, se llega siendo bueno, no por uno que aporte capital… Desafortunadamente muchos llegan por esta vía hoy en día.
Webber hace una perfecta distinción entre los pilotos que aterrizan al «Gran Circo» de la forma tradicional frente a los que vienen acompañados de empresas, «Necesitamos el calibre de lo que tenemos al frente de la parrilla… Si te fijas del décimo puesto hacia el final hay muchos ‘pilotos por pago’. Eso no está bien», afirmaba resignado ante la actual realidad.
Continuando con la comparación, Mark aportaba más argumentos para mostrarse en contra de esta clase de piloto, “siempre hubo pilotos de pago, pero cuando yo empecé creo que los pilotos que lo hacían bien en las categorías inferiores tenían más probabilidades de llegar, y no solo porque un gobierno te esté apoyando. Hay varios como Maldonado que no deberían estar ahí”, finalizó defendiendo con más pilares su opinión.
Por si no fuera poco, también critica a la categoría «destacada» del automovilismo, pidiendo que haya cambios. «Necesitamos que los coches sean más emocionantes, más rápidos, que suenen más. Simplemente ponerlos a un nivel donde no estén tan cerca de otras categorías como ahora. En la GP2 están haciendo tiempos por vuelta muy similares. Eso no es correcto», concluyó mostrando su disconformidad. Además las audiencias han ido decreciendo desde el último lustro por lo que el Grupo de Estrategia piensa realizar una revolución para que la F1 vuelva a ser espectacular, ya que en muchos factores se ha ido perdiendo «seriedad» y «emoción» y para 2017 se tenía planeado tal reestructuración pero todo apunta que se retrase hasta 2018.
El piloto Mark Webber ha valorado todos los puntos que hacen que se note una decadencia bastante notable respecto hace una década. Nadie mejor que alguien que estuvo dentro para resaltar los problemas evidentes actualmente, por lo que el cambio de perspectiva es totalmente necesario para que vuelva a ser la máxima categoría del automovilismo mundial.