Nemanja Bjelica dio la victoria, a falta de tres segundos, dejando el marcador 68-66 ante una buena Alemania.
La selección local comenzaba a afrontar los partidos serios del grupo de la muerte tras superar a la ‘cenicienta’ Islandia sin mucho brillo. Por su parte, la selección serbia llegaba con muchísima confianza ya que derrotaron a España durante la primera jornada.
Los alemanes comenzaron con más acierto durante los primeros minutos. El base de Atlanta Hawks Schroder y la pareja interior Pleiss-Nowitzki realizaron buenos conjuros en el ataque. Los serbios fallaron muchas canastas fáciles, por ejemplo Milos Teodosic con dos bandejas.
Serbia sin sacar su potencial
Sin embargo, no estando aún muy cómodos sobre la pista, se encontraban empatados con la selección que estaba jugando en casa. El juego interior alemán perdía mucho sin los dos pivots titulares. En el momento que tuvieron que sentarse, los hombres de Djordevic, se aprovecharon de bastantes rebotes ofensivos. Sin embargo, Dirk Nowitzki salió a cancha para poner orden y no dejar que una Serbia alocada no cogiera diferencias en el marcador.
El conjunto serbio estaba pecando muchísimo desde fuera y aún no encontraban ese baloncesto tan potente que les hizo llegar a la final del MundoBasket. Ese juego individual hacía que los germanos consiguieran una leve ventaja con dos triples seguidos de Dirk yéndose hasta el 29-36.
Una vez más, los rebotes ofensivos estaban siendo clave para Serbia cuando Pleiss y Nowitzki se encontraban en el banco. Además, el juego de ataque alemán estaba con pocas ideas sin su líder. Cuando los primeros veinte minutos reglamentarios llegaron a su fin el marcador era de 39-38 para Serbia. Lo bueno para ellos era sus piezas clave no tuvieron mucho protagonismo.[su_youtube_advanced url=»https://www.youtube.com/watch?v=SZGemXDhZtY&index=25&list=PLCXERy73Oiz9Myhm-HhTV1dT1XURB_NME»]
En el tercer cuarto no se vio nada nuevo ya que siguió la misma dinámica. Lo que podía resaltar era la gran defensa de los dos equipos. Los alemanes seguían en la lucha de llegar vivos al final del partido y los serbios no conseguían estar cómodos en ningún momento. No obstante, la calidad individual les hizo llegar al último cuarto por delante, 50-48.
Parecía el momento para que los subcampeones del mundo se fueran en el marcador. Sin embargo, un triple de Nedovic que no entró no les dio una diferencia respetable de nueve puntos. Por su parte, Alemania estaba muy bien en defensa y el juego con Nowitzki estaba siendo eficaz.
Erceg y Nemanja Bjelica ayudaron con triples para empatar en el marcador con una Alemania realizando un auténtico partidazo. Aún así, Nemanja con la patata caliente en su mano se jugó un tiro muy importante colocando a su selección con ventaja, 64-62. Los alemanes no daban su brazo a torcer y Schafarzik empató el partido con un triple después de que su equipo jugara con mucha paciencia.
Nemanja cierra el choque
A falta de 3 segundos y sacando por el lateral, el balón llego para Bjelica y cerró el partido con una canasta debajo del aro. Con una gran Alemania enfrente se llevaron la victoria en un choque donde no consiguieron sacar su gran potencial.
Dirk Nowitzki fue el máximo anotador del partido junto a Tibor Pleiss con 15 puntos. Por parte de los serbios, Nemanja Bjelica fue el mejor con 12 puntos en una tarde donde Milos Teodosic terminó con 0 de 9 en tiros de tres.