El actual presidente de la Scuderia Ferrari, contento tras el GP Italia, se siente relativamente cómodo al pensar que el año que viene las cosas serán distintas y cuenta, que lo que les diferencia a los otros años es que el equipo piensa en 2016 sin dejar de trabajar en 2015.
El sucesor de Luca di Montezemolo ha hablado después de su primer Gran Premio de Italia como presidente de la Scuderia. Está contento, tranquilo, ilusionado, pues prometen ser competitivos de cara al 2016 y no “perseguidores” como dice ser hasta ahora. El presidente apunta a la competencia con los Mercedes y lo hace sin dejar de pensar en este año: «2016 será otra historia, será un ambiente completamente diferente. Llevamos trabajando en el motor de 2016 bastante. La diferencia entre este año y las otras temporadas es que no hemos abandonado el trabajo actual, 2015 ha seguido siendo el centro de nuestro trabajo de desarrollo y por eso estamos aquí hoy, en la parte delantera. En la última temporada, nos dábamos por vencidos y empezábamos a trabajar en el próximo año. Hemos estado haciendo las dos cosas pero creo que hemos mantenido nuestro énfasis en 2015 y 2016″.
Sergio Marchionne está muy satisfecho con los resultados cosechados hasta la fecha, 2 victorias y 7 podios y elogia el trabajo realizado por el equipo: «Estoy encantado con el trabajo que ha hecho Maurizio Arrivabene. Creo que él, James Allison, los mecánicos que trabajan en el motor, Lorenzo Sassi… hay mucha gente que ha trabajado muy duro durante los últimos doce meses para remediar algunos contratiempos técnicos que tuvo el coche en su proceso de preparación para 2015. Creo que hoy en día tenemos algunas limitaciones técnicas en el desarrollo del motor porque hay problemas que no se pueden solucionar con el tiempo que hemos tenido, pero es algo que estará solucionado para 2016«.
La Scuderia se va de Italia con 270 puntos (178 de Vettel, tercero, y 92 de Raikkonen, quinto) y con un gran sabor de boca después del segundo puesto del alemán. Él mismo ha dicho. ser la mejor segunda posición de su vida ya que subirse al podio vestido de Ferrari es una gran experiencia. En Maranello se afronta la temporada restante con ilusiones, ya que igualar la segunda posición que consiguió Alonso en 2012 es a lo máximo que se puede aspirar y aprovechar los errores de los Mercedes para sumar puntos. Con la misma alineación de pilotos para el año que viene y si realmente consiguen el deseado motor competitivo, ¿quién sabe si después de 8 años, Ferrari vuelve a ser campeón del mundo?