El español afirma que dichas barreras “no deberían haber acabado encima de él”. Sin embargo, dice estar contento y encontrarse bien.
Tras el aparatoso accidente que sufrió en pasado 10 de octubre en los terceros entrenamientos libres del Gran Premio de Rusia y que le impidió disputar la clasificación, Carlos Sainz llega a Austin con mucha ilusión.
“Después del fin de semana en Rusia volé a Faenza para pasar unos días con el equipo antes de volver a casa, así que pude trabajar en el simulador”. “Estoy contento y me encuentro bien. Empecé a entrenarme en cuanto llegué a casa”.
Aunque el accidente fue bastante impactante, el piloto de Toro Rosso afirmó que no fue tan grave como se vio desde fuera: “Yo estaba muy tranquilo, solo perdí la respiración unos 5 o 10 segundos. En cuanto la recuperé, me toqué todo el cuerpo para ver si estaba bien. Al ver que tardaban tanto en quitarme las protecciones, lo que más me preocupaba era que la gente estaría muy preocupada”.
Sobre los sistemas de protección de Sochi declaró que: “No creo que las barreras estuviesen bien colocadas, no deberían haber acabado encima de mí”. También ha afirmado que se intentará aclarar lo ocurrido.
Su abandono en el GP de Rusia no ha sido el único de la temporada, y el Sainz se lamenta de todas las oportunidades de puntuar perdidas este año. “Se nos han ido muchos puntos, sumando pit stops lentos, sanciones y demás cosas”. El español afirma que se le han escapado “más de 22 puntos”.
Sobre el circuito de Austin, Carlos ha dicho que: “Han hecho muy buen trabajo, hay subidas, bajadas y muchas curvas rápidas, además de rectas largas en las que se puede adelantar”. “Nunca he estado allí y solo he pilotado en el simulador, pero el circuito parece increíble”.