El piloto de Mclaren no pudo pasar a la Q2 debido a un pinchazo en su última vuelta lanzada
Ambos Mclaren estuvieron rodando entre los 1,5 y 2 segundos respecto a la cabeza durante los entrenamientos libres y consiguiendo puestos cercanos a los diez primeros. Sin embargo en la sesión clasificatoria parecía que seguiría esa continuidad, por Jenson Button sí fue así finalizando 12º mientras que el otro Mclaren tuvo más mala fortuna.
El piloto español había estado logrando buenas posiciones a lo largo del fin de semana, y durante la primera eliminatoria también fue así, teniendo opciones reales de pasar a la segunda ronda pero una pieza que se desprendió del monoplaza pudo ser la causa de un pinchazo causando que su mejora de tiempo en el último stint se fuera perjudicado por dicha pieza, por la que partirá decimoséptimo justo por detrás de Sebastian Vettel.
Una vez finalizada su participación en la sesión, el español fue preguntado por la buena actuación del coche, que no había causado problemas durante estos días de Gran Premio, pero por el pinchazo volvió a caer en la Q1. El piloto se mostraba confiado con el ritmo del MP4/30 en la que podría haberlo colocado muy cerca de los diez más rápidos. “En el último intento cuando veníamos en una buena vuelta, un pinchazo, estábamos en torno al 12º o 13º. En todo el fin de semana el coche ha respondido bien, hemos introducido unos cambios y el circuito se adapta un poco mejor a nuestras características”, respondió el español que veía capaz partir desde una buena posición de cara a la carrera.
También fue preguntado por esas supuestas declaraciones de Ron Dennis realizadas por parte de Eddie Jordan; suponiendo que si monoplaza de 2016 no fuera competitivo, Alonso se tomaría un año sabático. En la que el bicampeón respondió con escepticismo que fuera verdad. “No creo que sea cierto, esperemos que el año que viene cuando nos pongamos en la pista ser competitivos y cuando seamos competitivos tener un poco de suerte o tener unos neumáticos que aguanten más de una vuelta”.
A partir de esos comentarios, las preguntas continuaron por la misma dirección, haciendo pensar que fuera una forma de presionar a algún miembro de la alianza Mclaren-Honda. “Si quiere meter presión a alguien, a mí seguro que no, sería a Honda para que hagan un buen trabajo todo el invierno”, contestó tajante.
Tras esas cuestiones, la carrera de mañana volvía a coger protagonismo, ya que se le preguntó cómo afrontaría la última carrera de la temporada. “Saliendo tan atrás y yendo 27 km/h más lentos en las rectas, será una carrera dura intentaremos divertirnos e intentar acabar mañana de la mejor manera posible”, concluyó el piloto de Mclaren que prevé unas 55 vueltas complicadas por la falta de potencia de su monoplaza.