Ambiente de (3/4, lejos del lleno) gala en el José María Martín Carpena para recibir al Valencia Basket. Un año más en los cuartos de final y con la eliminatoria en juego, Nervios y más nervios. Con Nedovic, como siempre de protagonista, Unicaja aguantaba el primer parcial de los taronja, 12-20. Entre faltas y el timing de Diot los de Pedro Martínez empezaban marcando territorio. Finiquitar por la vía rápida. Debutaba, exitoso y sereno, Peterson. Refuerzo y lujo para los visitantes.
3 robos y defensa al límite rescataba de la mediocridad a Unicaja. La resistencia, el factor Carpena, el que no se da por vencido. Carlos Suárez, alma máter y la definición de lucha y combate, levantaba a los suyos con constancia. Solo el acierto, descomunal, desde el perímetro visitante colocaban el 29-34 al descanso. Hamilton el mejor, su muñeca firmaba ya 8 puntos. Mucho partido por delante pero solo para valientes. Mal día para Díez, habitual, pero inesperado para Díaz. Las faltas no serían, al menos, un problema…
Hasta que llegaron los colegiados. En menos de 5 minutos señalaron 9 (dos técnicas incluidas) a los malagueños. Escandaloso. La afición indignada y el partido desvirtuado. ¿Por qué los árbitros quieren tanto protagonismo? Inexplicable. Dejar a un equipo mutilado en 2 minutos con unas semis en juego es un despropósito. Poco hay que hacer contra ello. Mientras Dubljevic anotaba un tiro libre tras otro y ampliaba la renta. Sin bajar el porcentaje de 6,75, Valencia seguía su camino. Guiado por su acierto y por el trío arbitral. Justo e injusto a la vez. Antibaloncesto.
50-67, 10 faltas de Unicaja en el 3° cuarto y el partido roto. A la deriva ya sin esperanza los cajistas no daban más. Manolo Rincón se iba del pabellón y la grada o se iba o se callaba. Resignada. Valencia, sin culpa y jugando a un gran nivel, veía el pase gracias al buen hacer de Diot, Stefansson y compañia. Nedovic piso el freno y Unicaja se apago. Se cierra asíuna temporada horrorosa en Málaga. Con pocas luces y muchas sombras, demasiadas. Además de ver un futuro incierto, el equipo acaba roto. Alberto Díaz y su crecimiento lo mejor, el resto mediocre.
El marcador reflejaba un doloroso y glorioso, depende del que lo mire, resultado en el Palacio de los Deportes José María Martín Carpena de Málaga, 59-88. Valencia Basket avanza hacia las semifinales de los Playoff de la Liga Endesa en un gran año. Se verá las caras, muy posiblemente ante el Real Madrid de Pablo Laso. Unicaja cierra con pitada arbitral y con sombras, demasiadas sombras. ¿Quién seguirá en Málaga la próxima temporada?
