El problema se repitió en ambos monoplazas, pero ajustar el coche de Hamilton llevó más tiempo que el de Rosberg
Las conversaciones de radio de la retransmisión del Gran Premio de Bakú dejaron claro que en las primeras vueltas Lewis Hamilton tenía problemas de energía en el W07. Por otro lado, Toto Wolff afirmó que Nico Rosberg también los había sufrido a pesar de liderar las 51 vueltas de la carrera. El piloto británico ha tardado 12 vueltas en arreglar el problema, y cuando han encontrado la solución ya era tarde para mejorar esa quinta posición final en la clasificación del primer Gran Premio en la «tierra de fuego«.
«Hemos tenido un problema en ambos coches. Fue un error con la configuración de algunos interruptores. El problema llegó un par de vueltas antes en el coche de Lewis que en el de Nico. No había forma de cambiar los interruptores en el volante, sin las instrucciones del ingeniero que lamentablemente no puede dar órdenes al piloto. Y esto causó un poco de confusión y nos llevó un tiempo muy valioso en el coche de Hamilton para poder solucionar el problema».
«Nico estaba en una situación afortunada ya que había hecho un cambio del interruptor antes, y únicamente tuvo que terminar de cambiarlo un par de vueltas más tarde. Lewis estaba tratando de averiguar lo que era, y tardó 12 vueltas. Cuando pudo volver a tener un rendimiento normal, ya era demasiado tarde”, han sido las declaraciones del director ejecutivo de Mercedes.