Muchas son las voces críticas acerca de la deriva que está cogiendo desde hace muchos años el deporte en nuestro país. Mas que el deporte en sí, la forma de contar la actualidad deportiva. Es ahí donde surge la pregunta, ¿tratamos el deporte como se debería, o «salvamizamos» el deporte donde lo único que importa es lo que se vende?
Desde este medio de comunicación, siempre hemos defendido y defenderemos la paridad de los deportes, sea cual sea. Es cierto que unos tienen mas repercusión y seguimiento que otros, pero esto no da pie a ignorar deportes también mayoritarios y únicamente subirse al carro de los mismos cuando hay un éxito de un compatriota a nivel internacional.
Este año olímpico se ha dado mas repercusión a deportes como el piragüismo, atletismo, baloncesto…, si BALONCESTO, un deporte mayoritario que se desprestigia a nivel nacional poco a poco, en parte por los medios de comunicación tradicionales que apenas dan repercusión a este deporte, salvo noticias de los «grandes», y en parte por los dirigentes de este deporte a nivel nacional que hace que se devalúe año tras año con una primera división cerrada y previsiones de una liga europea en la que los grandes dejarán la competición nacional.
Dicho lo cual, nadie está para dar lecciones para las líneas editoriales a seguir de cada televisión, radio, página web…, pero lo que está claro es que se está haciendo mal en este país cuando los dos principales diarios de tirada nacional abren sus portadas con una imagen de Cristiano Ronaldo disfrazado con su hijo, y con el título «Un Madrid Feliz», mientras a pocos kilómetros de donde se producía esta instántanea cotidiana, un colombiano se proclamaba campeón de la Vuelta Ciclista a España. Y es que Nairo Quintana celebrando su triunfo era un hecho tratado de manera residual por parte de la gran parte de los medios sensacionalistas.
Si saltamos al mundo del motor, ocurre lo mismo. Vende más una discusión entre dos pilotos o una acción antideportiva que genere debate, que una victoria o un ejemplo de superación. Y es que hace años todos éramos «asturianos» y España era «Paraíso Natural», pero lo cierto es que la difusión actual de la F1 por ejemplo a nivel nacional, dista mucho de cuando un español reinaba en la Fórmula 1.
Se podrían poner mil y un ejemplos de la escasa difusión de logros deportivos, y es que es mejor hacer un programa deportivo hablando una hora de Messi y CR7, y destinar tres minutos al resto de acontecimientos deportivos. Muchas de las personas que con toda libertad eligen este tipo de información, criticarían al público que ve programas rosas. Tanto como unos como otros tienen todo el respeto por parte del que les escribe estas líneas. Únicamente me gustaría que reflexionasen acerca de si el deporte tal y como se cuenta en la actualidad es del todo justo con todos los deportistas, y si ¿estamos «salvamizando» el deporte? Desde estas humildes líneas queremos abrir ese debate.
No puedes poner un límite a nada. Cuanto más sueñas, más lejos llegas, Michael Phelps