La labor de los frenos de los Fórmula 1 en el Circuito de las Américas examinada a fondo
Situado en las colinas que se elevan sobre el centro de Austin, el Circuit of The Americas es el primer circuito de EE.UU expresamente construido para la Fórmula 1. La configuración del circuito lo diseñaron el ex campeón del mundo de Motociclismo Kevin Schwantz y el promotor Tavo Hellmund. Se inauguró en octubre de 2012 y hasta la fecha se han celebrado 4 GP de Fórmula 1 y otras tantas carreras de MotoGP. Con respecto a las motos, los monoplazas emplean unos veinte segundos menos por vuelta; aunque, van más lentos en términos de velocidad punta.
Una de las características de este circuito es la impresionante inclinación de la recta de llegada: en total hay 41 metros de desnivel, entre el punto más bajo y el más alto de la pista, con las consecuencias fácilmente imaginables para los pilotos, que muchas veces cometen errores de frenada.
Según los técnicos Brembo, que han clasificado las 21 pistas del Mundial utilizando una escala de 1 a 10, el Circuit of The Americas está dentro de la categoría de los circuitos poco difíciles para los frenos. La pista de Texas está clasificada con un índice de dificultad 5, solamente superior al de Interlagos, Silverstone, Spa y Suzuka.
La labor de los frenos durante el GP
En las 4 carreras disputadas hasta la fecha en el Circuit of The Americas ningún piloto ha conseguido realizar una vuelta a una velocidad media de 200 km/h. La culpa es de la tortuosidad extrema de la pista, como lo demuestran sus 20 curvas. En los frecuentes cambios de dirección no siempre se usan los frenos, lo que explica que las frenadas representen solo el 17 por ciento de la duración total de la carrera. La desaceleración media, sin embargo, es la más alta de las últimas 7 carreras (último tercio) del Campeonato del Mundo: 4 g, idéntica al valor de Melbourne.
La energía disipada en frenada es de 133 kWh, equivalentes al consumo por hora de 133 toros mecánicos (toros de rodeo). Desde la salida hasta la bandera de cuadros cada piloto ejerce una carga total sobre el pedal de casi 78 toneladas.
Las frenadas más difíciles
De las 11 frenadas del Circuit of The Americas, 4 están clasificadas por los técnicos de Brembo como duras para los frenos, 4 son medianamente difíciles y 3 son ligeras. La más difícil de todas es la curva 12 porque los coches llegan después de haber tocado la máxima velocidad: aquí los coches pasan de 337 km/h a 78 km/h en 1,35 segundos, en los que recorren 127 metros, equivalentes a la distancia entre las dos curvas del Texas Memorial Stadium. Los pilotos ejercen una carga de 187 kg en el pedal de freno y afrontan una desaceleración de 5,7 g.
La frenada más larga es la de la curva 11: 131 metros para pasar de 298 km/h a 78 km/h en 1,55 segundos, pero con una desaceleración de “solo” 4,7 g. Sin embargo, la curva más lenta del circuito es la primera, afrontada a 74 km/h, después de una frenada de 1,37 segundos necesarios para perder casi 250 km/h. La curva 6 y la curva 8 se contienden el premio a la más frenada más corta: 18 metros para la primera (de 290 km/h a 226 km/h) y 19 para la segunda (de 224 km/h a 178 km/h), es decir menos 4 monoplazas de Fórmula 1 puestas en fila. La desaceleración de la curva 6 es de 4,6 g y la carga en el pedal de 99 kg.
Victorias Brembo
Los monoplazas con frenos Brembo han ganado 3 de las 4 ediciones del GP de Estados Unidos disputadas en el Circuit of The Americas. En general, los frenos Brembo han conquistado 20 ediciones del GP de Estados Unidos, 12 de ellas con Ferrari. 5 victorias de Michael Schumacher y 4 de Ayrton Senna