El piloto inglés da marcha atrás en sus declaraciones sobre la escudería y declara una total confianza hacia su equipo
El vigente campeón del mundo no ha dudado en expresar su frustración tras verse obligado a aparcar su coche en la pista, y achacaba sus problemas de motor a un posible sabotaje por parte de Mercedes. Sin embargo, horas después, Lewis Hamilton, más relajado, ha querido matizar sus palabras y tanto él como el equipo han publicado un comunicado al respecto.
«Verstappen estaba dentro de mi ventana de parada y tenía que tratar de alejarme de él, pero de repente en la recta perdí la potencia y tuve que parar. Honestamente hay que entender mi punto de vista, cuando tienes que bajarte del coche por un fallo mientras lideras la carrera es difícil decir cosas positivas en el momento, el dolor es indescriptible.»
Además de disculparse, ha querido confirmar que a pesar de los problemas que ha estado sufriendo durante la temporada con su W06, mantiene la confianza en su equipo y valora el trabajo que han realizado durante los últimos años, lanzando un mensaje de unión a sus mecánicos.
«Tengo la confianza al 100% en ellos, es mi cuarto año con los chicos en el garaje y en la fábrica. Me encanta estar aquí y sin ellos no habría ganado dos campeonatos. Siento que he sido bendecido con la oportunidad de estar aquí rodeado de grandes personas, logrando montones de victorias y rompiendo registros. Vi lágrimas en los ojos de mis mecánicos, así que se que nos ha dolido a todos. Siempre que hemos tenido problemas con el propulsor han encontrado la causa. Los chicos van a tener el motor e investigarán lo que ha pasado. Esto nos ayudará a asegurarnos que no se repitan los problemas de cara al año que viene.»
Si bien su mensaje es una clara disculpa hacia el equipo, eso no le ha impedido ser sincero y mandar un recado a la directiva de la escudería, de la que con sabotaje o no, Hamilton sigue notando una falta de apoyo en favor de su compañero Nico Rosberg, y que pone en duda el nivel de confianza que el tricampeón mantiene con sus jefes.
«Mercedes ha construido 43 motores y a mí me han ocurrido la mayor parte si no todos los problemas. No tengo ni idea de lo que sucederá en las próximas cinco carreras, pero todo lo que puedo hacer es centrarme lo máximo posible, hacer actuaciones como la de este fin de semana y rezar porque el coche se mantenga entero. Si al final de la temporada las fuerzas superiores no quieren que sea campeón del mundo después de todo lo que he hecho, tendré que aceptarlo, pero al menos terminaré el año sabiendo que lo he dado todo y he hecho todo lo que podía hacer.»