El ruso sale del agujero en el que se había sumido tras el descenso a Toro Rosso y aparece en una buena posición para volver a un coche competitivo como el Force India de Hülkenberg
Una vez que todo (o casi todo) el mundo daba por muerto a Daniil Kvyat, el ruso de repente y cuando menos se esperaba, renace de sus cenizas cual ave fénix. El 9º puesto de Singapur y la reacción que se ha producido en él desde esa cita invita al optimismo y a que se pueda recuperar a este gran piloto que casi tenía dudas de acabar la temporada en Toro Rosso.
El bajón en picado del rendimiento de Toro Rosso desde aproximadamente mediados de temporada o incluso antes ha provocado también un bajón en los resultados del equipo italiano. El equipo filial de Red Bull está notando la nula evolución del motor Ferrari 2015 y es por ello que sus pilotos parezcan peores de lo que son, tanto Sainz como Kvyat.
Daniil Kvyat durante del GP de Singapur a bordo de su Toro Rosso / formula1.com
Pero el natural de Ufá ya llegaba con su propia crisis y esta se agravó a un más con el bajo rendimiento y las dudas en el apartado técnico y de mejoras del equipo de Faenza. Una vez habiendo tocado fondo, de vuelta de todo y decepcionado con la propia Fórmula 1, el circuito de Marina Bay nos devolvió al auténtico Kvyat.
Ese piloto agresivo que llegó a la máxima categoría del automovilismo mundial a punto de cumplir los 19 años y consiguió mantener a Red Bull en una posición que quizás no era la que merecían por el rendimiento del coche.
Ese joven con hambre que no se dejó amedrentar por el niño mimado de Red Bull que le bajó del coche. Además luchando con todas las de la ley y sin sobre pasar el reglamento, llegando a desesperar al propio Verstappen. Que aunque finalmente lo acabó adelantando por la diferencia de coche, supuso la vuelta al gran público para Daniil.
Pero aún así todavía seguía habiendo muchas dudas que pudiera continuar en fórmula 1, y toda vía las hay… Pero el equipo indio sufrió a principios de semana la baja de un piloto sólido como Nico Hülkenberg, que te garantiza solidez y muchos puntos en la clasificación. Y la búsqueda de sustituto se centra más en un piloto con algo de experiencia que en hacer debutar a un chaval.
La nueva normativa exigirá un esfuerzo para adaptarse y desde la escudería india no quieren arriesgarse con un novato en un periodo de cambio tan drástico. Es por eso que el ruso Kvyat parte con ventaja sobre otros posibles candidatos como Ocon o Palmer. El rendimiento que ha demostrado tener el de Ufá en prácticamente los 3 años que lleva en F1 encaja con las características que debería tener el próximo compañero de Sergio Pérez en Force India.
Ante el potencial económico o la protección de Mercedes, el talento de Daniil parece haberle dado ventaja en la pelea por uno de los asientos más golosos que todavía queda libre en la parrilla. Aunque todavía no sabemos que decisión tomará Red Bull respecto a su todavía piloto, lo que está claro es que de ello depende su futuro.
Si le mantienen su contrato se quedará en Toro Rosso y si deciden finalizarlo entonces podrá negociar con Force India y sería el mejor colocado para sustituir a Nico, pero todo depende de Red Bull.
