Fernando Alonso consigue cerrar el top-ten pese a un trompo con salida de pista en los últimos compases del Gran Premio
Tras 72 vueltas, con unos cuantos accidentes y siendo el protagonista el Safety Car, Alonso consigue cerrar la carrera en la misma posición desde la que partía, décimo. La cruz de la moneda en su equipo ha sido su compañero, Jenson Button, que al intentar utilizar neumáticos intermedios se vio relegado al vagón de cola. Situación que repitió el piloto español en la vuelta 56 tras sufrir un trompo en la subida hacia la recta de meta, aunque se repuso de forma magistral del mismo.
En la vuelta 44 fue adelantado por Sebastian Vettel en una maniobra que no ha sentado nada bien al bicampeón del mundo, ya por radio manifestó que «Vettel le había echado a la hierba».
Concluida la carrera se refirió al asunto:
«No espero ninguna decisión por parte de dirección de carrera, habría pasado algo ya. Utilicé la escapatoria de asfalto, si llega a haber un muro o choco o me vuelvo contra él. Seguramente si se repite la situación me iré contra él y perderá más posiciones que yo».
Ciertamente hubo tensión en el adelantamiento, pero estos comentarios difieren bastante de su actitud cuando el adelantamiento fue suyo sobre Felipe Massa en Austin.
«Con lluvia nunca sabes. La visibilidad es reducida hasta el punto de encontrarte con los espejos empañados. Así estuve casi toda la carrera, no veía nada detrás, así que usé el asfalto y ya está».
Se reafirmó en sus palabras iniciales, atacando al piloto de Ferrari con las siguientes declaraciones:
«Algún día habrá que ir contra él, para que se de cuenta de que el circuito es de todos».
La polémica parece no cesar por donde pise Sebastian Vettel, Fernando es consciente de ello y tiene motivos para quejarse, cuando la misma situación se repitió después con Max Verstappen y Vettel y este último se quejó enérgicamente ante esta acción.