El presidente de Ferrari reconoce perfectamente las áreas en las que más sufre la escudería e insta a solucionarlo lo más rápido posible
2016 no ha sido un año fácil para Ferrari, que después de preparar un SF16-H que se había erigido como la alternativa a Mercedes, la marcha de su director técnico, James Allison, en la primera parte de la temporada, les ha lastrado en el desarrollo. Esta situación la ha aprovechado Red Bull, que les ha adelantado por la derecha con el trabajo realizado a lo largo de los Grandes Premios de la temporada.
En la celebración anual de Ferrari, la Finali Mondiali, que tuvo lugar el pasado fin de semana en el circuito de Daytona, el presidente de la marca, Sergio Marchionne, ha hecho balance de la temporada y ha reconocido la falta de desarrollo en el departamento aerodinámico ha sido el principal problema este año.
«El area de aerodinámica ha sido el punto débil en cuanto al desarrollo estratégico de Ferrari en los últimos años, por lo que buscaremos una solución a este asunto. Esto no quiere decir que el propulsor no sea importante, seguiremos trabajando en ambos apartados, pero el principal problema es que tenemos que reconocer que tenemos que cerrar la brecha en el apartado aerodinámico lo más rápido posible.»
Este año Red Bull ha progresado enormemente gracias al desarrollo del chasis y a una unidad de potencia Renault que lejos queda de lo visto en los dos años anteriores. Si bien al comienzo del año parecían ser la tercera fuerza del campeonato, el trabajo realizado a lo largo de la temporada les ha permitido no solo superar la marca del Cavallino, sino también alcanzar a Mercedes. Este nivel de evolución mostrado por el equipo austriaco es lo que Marchionne considera que ha faltado en Ferrari.
«Este año hemos identificado cuales son los dos principales apartados en los que estamos por detrás. Uno es el rendimiento en la pista, pero más importante es el nivel de evolución con respecto a los otros equipos. Al comienzo de 2016 vimos a un Red Bull que parecía no tener las cualidades necesarias para luchar con Ferrari. Pero al final de la temporada, se convirtió en un claro rival, y eso se debe al trabajo que han hecho en el apartado del chasis.»
Para 2017, el equipo que se ha postulado como rival principal de Mercedes es Red Bull, pero Marchionne se ha mostrado escéptico acerca de esto, y confía en trabajo de su equipo para evitar que esto se haga realidad. Además sabe que están obligados a obtener resultados mejores de lo logrado este año si no quieren perder la confianza de sus pilotos, más aun cuando hay gente que ve a Sebastian Vettel vistiendo los colores de las flechas de plata en un futuro no muy lejano si la situación en Maranello no mejora.
«Creo que es muy difícil hacer una predicción acerca de 2017. Nosotros nos estamos preparando para poder desarrollar el coche durante el año, algo muy importante si queremos mantener la competitividad desde la primera carrera en Australia. Si repetimos otro año como 2016, no creo que seamos capaces de atraer a grandes pilotos. Nuestros pilotos tienen contrato para 2017, más allá de eso no se que pasará, pero dependerá en gran medida de como se desarrolle la próxima temporada.»