Si alguien sabe lo que representa correr en las dos principales categorías del automovilismo es Mark Webber quien tras varios años corriendo con Red Bull en la F1, logró ver su sueño de coronarse campeón con el equipo Porsche LMP1 en el mundial de resistencia de la WEC sobre autos prototipo, en donde acabó su carrera como piloto.
La verdad desde el año pasado el hecho de que Alonso decidiera perder el Gran Premio de Mónaco por correr la Indy 500 fue algo que llamó la atención, e incluso molestó a algunos compañeros que aducían una falta de compromiso del piloto español, la verdad es que fue un premio de consolación para él por parte de McLaren por el desastroso año con Honda, que curiosamente fue la misma razón de su abandono, una falla del motor japonés.
Por eso que ahora Mark salga a cuestionar la decisión de Fernando Alonso de correr las 24 horas de Daytona no ha llamado del todo la atención, pues en la aventura en Indy del español, Alonso invitaba a Webber a que corriera, algo a lo que el Australiano se negó por respeto a sus compañeros pilotos en Indy y su falta de interés en hacerlo (aun y cuando él ya estaba retirado de la WEC).
En buena medida creo la posición de Webber se debe a que él sabe lo que representa prepararse física y mentalmente para cada campeonato, sabe lo que representa correr cada tipo de auto y conoce el esfuerzo mental que se requiere por eso, este tema de brincar entre categorías por gusto, quizás no sea lo mejor para el asturiano:
“Es un error, la F1 y el WEC son cosas completamente diferentes. Tanto Daytona como Le Mans te absorben mucho mentalmente, requieren mucha energía mental. Si haces F1, no te puedes dar el lujo de tener ciertas distracciones. Si decides correr Le Mans, tienes que hacerlo de forma correcta enfocado al 100% en ello, en lugar de trabajar para ello solo tres semanas antes, con un enfoque desenfrenado, sin pensar en el resto del año. La F1 de hoy es muy específica y no permite espacio para errores”.
Aunque quizás el único piloto indicado para dar una opinión sobre esto sea Brendon Hartley, campeón actual en la WEC, y quien el año pasado estuvo intercambiando asientos desde el Gran Premio de Austin, entre el Toro Rosso STR12 y su Porsche LMP1 en el WEC.
Sin embargo se sabe que la tarea esta vez no será fácil, y de hecho Alonso y su equipo de momento no pintan como favoritos, a diferencia de la Indy 500 en donde su compañero de equipo ganó la carrera al aguantar el motor Honda, por lo que quizás esta prueba le sirva para tomar una decisión de buscar un equipo para Le Mans o no, al final la temporada de F1 no ha comenzado y si alguien sabe de cómo prepararse físicamente para la temporada es el propio Alonso.