A pesar de que ya sabemos como son todos los coches de la parrilla, nos falta ver cuál va a ser el rendimiento actualizado de estos nuevos coches. No podemos olvidarnos que este año, 2019, los equipos han tenido que realizar muchas modificaciones técnicas en los monoplazas debido al nuevo reglamento implantado para esta temporada y las demás.
Las reglamentaciones han cambiado bastantes aspectos del coche, entre ellos la aerodinámica, tanto la delantera como la trasera, como hemos visto en trabajo que han realizado las marcas en las presentaciones de Fórmulas 1 de este año.
El jefe de la escudería Ferrari y antiguo director técnico, Mario Binotto, ha trasladado la opinión que tienen muchas personalidades sobre que el rendimiento de estos coches iba a ser más lento. Sin embargo, Binotto nos ofrece los datos para reflejar esta realidad:
“Nosotros hemos calculado un impacto de 1.5 segundos por vuelta cuando hemos rodado con nuestro monoplaza en el túnel de viento y esto son los datos que tenemos».
Además, el jefe de Ferrari nos da las claves de este “retroceso”:
“Estos monoplazas son más pesados que los del año 2018. No olvidemos que la aerodinámica, especialmente el alerón delantero es mucho más simple. La expectativa antes de probarlo era 1.5 segundos y así se ha reflejado en el túnel de viento. Por lo tanto, ahora se trata de ver cuándo recuperaremos esos 1.5 segundos durante todo el período de desarrollo. Lo que recuperaron los demás, solo en la pista se sabrá».
Otra de las voces que hablo fue el director técnico de Raicing Point, Andrew Green, donde sus palabras son, incluso más extremistas que las de Binotto:
«El equipo ha tratado de descubrir si las nuevas reglas mejorarán las carreras y, lamentablemente, el resultado ha sido decepcionante. No pensamos que ayuden a apretar la parrilla. Además, hemos comprobado que al ver nuestros datos es que se produce una gran pérdida, muy significativa de rendimiento, algo que aún tratamos de recuperar».
Tendremos que esperar hasta la primera carrera del campeonato para comprobar si las voces expertas en materia tienen toda la razón o por el contrario la nueva normativa no ha solucionado nada y ha creado un nuevo problema.