Una mañana intensa y llena de anuncios, así ha sido la mañana para la Fórmula 1. La cancelación del Gran Premio de Francia nos dejaba un sabor amargo, y nos hacia empezar mal la semana.
Todo lo contrario. Poco tiempo después, se anunciaba lo que serian los bocetos de un nuevo calendario de la F1 tras está pandemia. Siendo a cita inicial la carrera del Red Bull Ring en Austria el fin de semana del 3-5 de julio. Una noticia que se venia oyendo desde hacia unos días y que parece ser una señal de esperanza dentro del deporte.
Uno de los pocos circuitos que ha quedado goma y se han escuchado los monoplazas de la F1, ha sido Barcelona. El Circuit de Barcelona-Catalunya tuvo la oportunidad de acoger los Test en febrero antes de que la crisis por el coronavirus tomara el protagonismo en Europa.
Con la crisis, Montmeló no suspendió la carrera como si lo hizo Australia o Mónaco, sino que se aplazó hasta nueva orden. En este momento y tras las pistas dadas hoy por Chase Carey, parece Barcelona tiene muchas posibilidades de acoger un Gran Premio. Esto es lo que decía Joan Fontsere, gerente general del circuito, en Autosport, sobre esta noticia:
«Desde el principio de todo, ofrecimos a Chase Carey, jefe de F1, que queremos estar en el calendario. Hemos ofrecimos la posibilidad de que Barcelona organice un evento, porque tenemos 30 años de experiencia y estamos muy bien ubicados en términos de logística.
Obviamente, si piensan que podemos ayudar a la F1 es tener un campeonato mundial más fuerte y mejor en el futuro, estaremos allí para ayudar. Así hemos actuado desde el principio hasta el día de hoy”.
En cuanto a fechas no sabemos cuando será el día oficial, pero para Fonsere, si que se podrán todas las facilidades para que se organice:
“Sabemos que la temporada de F1 empezará en Europa en julio / agosto, y seguramente, nosotros estaremos allí, en una de esas fechas. Seguimos en contacto directo con los órganos principales de la F1 y tenemos conversaciones sobre una posible nueva fecha en la temporada que se avecina».
También el gerente del circuito ha hablado sobre la posibilidad de realizar un Gran Premio sin espectadores:
«Sabemos que podemos organizar un evento así sin espectadores en dos o tres semanas. La forma de gestionarlo sería sencilla, porque tenemos 320 días de actividad al año en la pista, es decir, que estamos preparados para que se apagan las luces en cualquier momento.
Obviamente, sabemos que sin asistencia será mucho más fácil porque no hay campaña de marketing y muchos eventos no se celebraran como se hacía durante los días del evento, ya que habrá control de espectadores.»
Una esperanza en el horizonte. La F1 ha sido una de las primeras competiciones internacionales que ha decidido dar un paso para volver a la normalidad, aunque sea con restricciones y condiciones.
La temporada no quiere darse por vencida e intentaran salvar esta temporada 2020. Esperemos que este remedio no sea peor y que podamos volver a disfrutar de este deporte aunque no sea como siempre.
