Tras semanas de discusiones, este viernes por la tarde ha tenido lugar una nueva reunión y más tarde una votación entre todos los equipos del gran circo para entre otras normas, ver si se llegaba a un acuerdo sobre el tema estrella: el techo presupuestario.
Pues parece que por fin tenemos fumata blanca. Según hemos podido saber se ha llegado a un acuerdo para aceptar un plan de reducción del límite presupuestario que se introducirá el próximo año de 30 millones de dólares, dejándolo finalmente en 145 millones$.
Recordemos que de cara a 2021 ya estaba limitado a 175 millones de dólares, pero la incidencia de la crisis sanitaria del coronavirus sobre las arcas de los equipos ha hecho que muchos de ellos soliciten que esa cantidad se viera disminuida.
De cara a 2022 se reducirá nuevamente a 140 millones y a 135 millones para el período de 2023 a 2025.
Este límite de presupuesto, se reducirá o aumentará en 1 millón por cada carrera que se elimine o se agregue al calendario.
Ferrari y Red Bull especialmente se habían opuesto a esta reducción, pero finalmente han aceptado por el bien del deporte.
Este acuerdo deberá ser ratificado la próxima semana por el consejo mundial del motor.
Además se ha acordado introducir un sistema de handicap de desarrollo aerodinámico. Existirá una cantidad de referencia definida de tiempo de utilización de túnel de viento y CFD permitidos, y una escala móvil de asignación de esa I + D en función de la posición final de un equipo en el campeonato anterior.
En 2021, para tener en cuenta el hecho de que los equipos tienen que desarrollar los autos según las nuevas reglas en 2022, el equipo que termine primero este año tendrá permitido el 90% de esa cuota, con una escala móvil en incrementos de 2.5% para que el equipo que termine el último, el cual tendrá una cuota de tiempo deñ 112.5%.
A partir de 2022, al equipo campeón, se les permitirá el 70% de la asignación total, con incrementos de 5% hasta que el equipo que termine en último lugar tenga un 115%. Cualquier nuevo equipo, recibiría la misma asignación que el equipo que termine el último.
Los equipos de fabricantes han negociado un quid pro quo sobre un tema conocido como el «valor teórico» de las piezas del cliente. Esta regla define una valoración para las piezas compradas por equipos más pequeños de los fabricantes, como por ejemplo las cajas de cambios y suspensión. Una vez que un equipo ha comprado esas partes, su valor definido se deduce de la cifra de tope presupuestario total de ese equipo.
Las conversaciones se prolongaron durante varias horas como resultado de la complejidad de estas ideas y la necesidad de definir todos los detalles potenciales dentro de ellas.
También se ha aprobado definitivamente la demora hasta 2022, de las reglas que en principio debían entrar en vigor la próxima temporada. De tal manera que los monoplazas de 2020, serán los mismos que compitan en 2021.
Ademas se han acordado restricciones en el desarrollo del motor en 2020 y 2021, incluidas las horas limitadas en el banco de pruebas y el número de actualizaciones permitidas por temporada.
En los próximos días, conoceremos más detalles.