Hace 35 años que Ferrari no tenía un día de clasificación tan negro. Hoy se ha dado el peor resultado en el circuito de Monza para el GP de Italia desde 1984.
Como si el fin de semana en Spa no hubiera sido suficiente, el día de hoy las esperanzas que se tenían, parece que han quedado muertas.
Lo que más llama la atención es que Sebastian Vettel no haya conseguido siquiera avanzar de la Q1. No ha tenido toda la culpa el monoplaza, tampoco el mismo piloto, sino el tráfico de los últimos minutos de la primera fase.
Las preguntas de todos estaban centradas en si alguno de los pilotos podría llegar a la Q3. Nadie pensó en hacerse la pregunta de si pasarían siquiera de la Q1.
@ScuderiaFerrari
Parece otro error de los muros. Cuando le dieron la salida al alemán quedó atrapado en el tráfico. Se encontró con un Red Bull, con el Williams de George Russell y el Alfa Romeo de Kimi Räikkönen. El enfado esta vez si lo escuchamos por la radio:
“¿Porqué los Alfa Romeo tienen que adelantar a todo el mundo?”
La explicación que después nos da el alemán de lo sucedido tiene palabras llenas de decepción:
“No sé, creo que no tenía sentido adelantarse. Hay un tiempo mínimo, todos deberían alcanzarlo. Cuando comienzas a adelantar, es justo cuando empiezas a crear problemas. Eso es lo que pasó.
Salimos con demasiados coches en el mismo lugar del circuito. Por eso, algunos pilotos empezaron a adelantar, y ahí se armó el lío”.
“Atrapados en el tráfico no podíamos hacer nada más. Creo que no era el momento adecuado para sacar el coche. No para mí. Ahora es fácil decirlo, no podría haber hecho nada distinto”.
Seb tendrá que largar desde P17 en su última carrera en Monza vestido de Ferrari. Aunque se ve como una tarea imposible, no da todo por perdido:
“La carrera es mañana. Los puntos se dan mañana. Veremos que podemos hacer en pista. El fin de semana aún no está del todo decidido”.
Aunque Charles Leclerc consiguió la P13 al pasar a Q2, se le nota en el rostro el dolor de las dificultades aquí, en el GP de casa para Maranello:
“Sabíamos que sufriríamos este fin de semana. Spa y Monza son probablemente las peores pistas para nosotros en este momento. Es difícil, sobre todo porque cuando crees haber hecho una buena vuelta, terminas P13. No se siente bien”.
“Duele más estando en casa. Es lo que tenemos este momento lamentablemente. Tenemos trabajo por hacer, la carrera es mañana.
Con suerte, para Mugello, que también es hogar de Ferrari, podremos estar un poco mejor”.
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Desde la cúpula del Cavallino Rampante, esta semana han estado enviando mensajes alentadores para todo el equipo. La esperanza del monegasco se mantiene en el futuro:
“Esperamos ver una luz al final del túnel a partir de la próxima carrera. Estos dos fines de semana son muy duros para nosotros. Hemos estado probando muchas cosas con el coche.
Nos toca mantener la cabeza en alto, seguir con la motivación para encontrar la salida. Estoy seguro que vendrán días mejores”.
En aquel 1984, Ferrari consiguió una remontada hacia los puntos con uno de sus autos. Este fin de semana, en cambio, la situación es mucho menos prometedora. Aunque, como bien sabemos, en la F1, cualquier cosa puede pasar.
