Luego de la cancelación de toda la actividad de este viernes, Carlos Sainz predice que por lo menos será un domingo impredecible y diferente en Nürburgring.
A pesar de no haber podido probar las nuevas piezas de su McLaren, el español cree que tanto el frío como la posibilidad de lluvia para la carrera puede traerles buenas oportunidades.
Simplemente por las temperaturas, que no serán más altas que 10°C, crearán una competencia completamente distinta a lo que hemos vivido durante el año. Sobre todo, en un circuito como este:
“Yo creo que el fin de semana va a ser diferente por el frío, ya sea que llueva o no. Tendremos muchos desafíos este fin de semana. Necesitamos estar atentos a muchas cosas, y si le sumamos lo que nos ha quitado no salir este viernes, sí que será un fin de semana divertido y con mucha incertidumbre. Esperamos tener más oportunidades por todo esto”.
Para Carlos el circuito no es nuevo como para algunos de sus compañeros, además de que la última vez que corrió aquí, las cosas le salieron bastante bien.
“Fue en 2014 cuando estuve por última vez aquí. Fue un gran fin de semana puesto que gané. Este circuito me gusta mucho. Es uno de los de la vieja escuela, es muy divertido, además de que siempre está el factor de la lluvia y la niebla. Lo hacen único”.
Para Sainz, las mejoras que traen para el GP de Eifel cree que serán de gran ayuda. Según el madrileño, la diferencia entre Racing Point, Renault y ellos, ronda las dos décimas, aunque eso depende del circuito.
“Creo que, si no tuviéramos actualizaciones y continuáramos con el mismo coche que en Mugello o Rusia, lo tendríamos muy complicado. Renault y Racing Point ya han dado el paso adelante. Lo bueno es que aquí por fin las tenemos (las mejoras). Esperamos que nos ayuden a recuperar el terreno perdido de las últimas semanas.
Son una o dos décimas para igualarles. Hasta tres para superarles. En un F1 es mucho. Pero eso sí, depende mucho del circuito, habrá algunos en los que ellos vayan bien y otros en los que nosotros vayamos mejor”.
Para McLaren ha sido un día de frustraciones, porque es justo hoy cuando pretendían probar todas las actualizaciones del MCL35. El fin de semana que resta será mucho más complicado porque tendrán que lidiar con lo desconocido.
“Hoy era el día importante para aprender sobre las piezas nuevas. Teníamos pensado comparar los dos coches para entender el nuevo paquete. Ya no podemos, así que saldremos mañana sin saber lo que va a pasar. Tampoco sabremos si funcionan como esperamos o no. Todavía no decidimos si las montaremos o no. Ahora vamos a hablar para preparar el plan de mañana”.
La pista norte del Nordschleife es aquella donde nada parece estar decidido. Más bien, es esa pista donde siempre está todo por escribirse. Con menos tiempo para todos, esto pinta para un fin de semana muy interesante.