Romain Grosjean fue dado de alta del hospital de Bahréin el miércoles por la mañana. Luego de extender el tratamiento durante un día más, el francés ya está listo para comenzar su recuperación en casa.
Recientemente ha expresado su deseo de regresar a pilotar en la última carrera de la temporada, que también será su última en la F1.
Lo que sigue ahora, es recuperarse de todos los golpes y quemaduras que tuvo en el accidente del pasado fin de semana. Así que no depende enteramente de su voluntad para correr estar en Abu Dhabi, sino de las quemaduras en sus manos.
La mano izquierda es la que presenta mayor grado de hinchazón, y es la que decidirá si el francés tendrá las condiciones para conducir.
“Todo depende de que mi mano izquierda esté bien la próxima semana. Si no puedo hacer todo lo que tengo que hacer con ella, no me arriesgaré a pilotar. Lo que tengo que hacer es descansar lo más que pueda y seguir todas las recomendaciones médicas para que se cure”.
Grosjean apunta que puede haber una secuela que sólo se podrá diagnosticar cuando baje la hinchazón:
“Primero, se debe bajar la hinchazón. En este momento está muy hinchada. Luego, tenemos que ver si no hay un impacto en el ligamento del pulgar”.
@Formula1
En palabras del piloto de Haas, el lado izquierdo de su cuerpo fue el que se llevó la peor parte del impacto en los guardarraíles del circuito de Bahréin.
“Todo mi lado izquierdo fue golpeado. Mi tobillo tiene un esguince, mi rodilla fue golpeada también y tengo bonitos moretones en el hombro, la nalga y el antebrazo.
Creo que mi pulgar izquierdo tampoco se salvó. No sólo es la mano más quemada, sino que parece que el pulgar también tiene un ligero esguince.
Tengo fuerza y puedo moverlo de muchas formas. Puedo cerrar el puño. Pero aún no puedo alcanzar mi dedo meñique. Normalmente sería capaz de hacerlo, pero con la inflamación y el vendaje, no puedo”.
Cuando Romain hizo el esfuerzo por salir del coche, se torció el tobillo izquierdo. Recordemos que tuvo que sacarse la bota de ese pie porque quedó atrapada detrás de los pedales de freno.
“En realidad lo que hacemos en el tobillo sólo es poner hielo. La evolución ha sido buena en dos días, así que la próxima semana seguro se habrá ido. No me preocupa para nada mi pierna izquierda. Lo único real es mi mano. Tengo unos cuantos años más para vivir con ella, así que ¡no debo estropearla!
Justo antes del almuerzo de hoy, pude apoyar el pie izquierdo sin dolor. Es un pequeño paso más en la dirección correcta. Aunque la mano izquierda no se ve muy bien, el dolor es bastante manejable. Tomo paracetamol, no hay nada más fuerte que eso”.
Grosjean también dijo que lo primero que hizo al salir del hospital fue llamarle a su esposa para decirle que viajaría a Abu Dhabi en vez de ir directo a casa
“Lo primero que hice fue llamar a Marion, ella estaba con mi padre y los niños. Les dije: Me voy a Abu Dhabi, lo siento, lo necesito para mí.
Necesito saber si soy capaz de volver a montarme en el coche. Quiero saber lo que voy a sentir, cómo va a ir y si todavía soy capaz de hacerlo. Es muy importante para mí”.
A reserva de recibir el alta médica y el permiso de la FIA para poder pilotar en el Circuito de Yas Marina, Grosjean se muestra contento y con mucho ánimo. Sabemos que un piloto necesita subirse lo antes posible a un coche luego de sufrir cualquier accidente.
Esperemos poder verlo despedirse detrás del volante de su etapa en la Fórmula 1.
