Cuando todo parecía que Red Bull había conseguido un consenso entre las escuderías para congelar los motores a partir de 2022 para aminorar costes, todo ha dado un giro de 180º y parece más lejano dicho acuerdo.
A principios de la semana pasada, Red Bull y Honda llegaban a un acuerdo para que los de Milton Keynes se harían cargo del conocimiento, la tecnología y parte del personal de los japoneses y, por lo tanto, a partir de 2022 competiría con los motores Honda pero bajo otra nomenclatura.
Sin embargo, la condición para esto era que se detuviera el desarrollo de los motores de F1. La congelación del motor fue discutida por los equipos, la FIA, la F1 y los proveedores de motores y todas las partes involucradas quieren reducir drásticamente los costos.
Pero las buenas predisposiciones mostradas por todos, al final se ha quedado en agua de borrajas para Helmut Marko:
«La buena voluntad que estaba allí el viernes pasado desapareció repentinamente el lunes. Obviamente, la competencia está ganando tiempo. Mercedes, Ferrari y Renault no necesariamente quieren ayudar a Red Bull con una decisión rápida»
Está prevista una importante reunión de Fórmula 1 para el 11 de febrero, donde se discutirá el programa de motores para los próximos años. Ciertos equipos no están a favor de la congelación del motor mientras no sepan cuál será la nueva fórmula del motor para la F1, que debería entrar en vigor en 2025 o 2026.
El jefe del equipo Red Bull, Christian Horner, y el asesor Helmut Marko, creen firmemente que los japoneses han construido un muy buen motor y harán todo lo posible para despedirse con el título mundial en 2021.
Pero dentro de seno de la Formula 1, Ross Brawn no está a día de hoy preocupados por la situación de Red Bull, ya que tendrán un motor obligatoriamente sí quieren seguir compitiendo:
«Al estilo típico de la Fórmula 1, actualmente hay numerosas discusiones. Si Red Bull realmente quieren seguir en la competición el reglamento estipula que tienes que conseguir un motor de todos modos y habrá un consenso entre todas las partes»