Carlos Sainz inició su aventura por la Fórmula 1 en 2015, año el que firmó por Toro Rosso. Después de dos años y medio, fue cedido a Renault F1 Team. Ahí, a pesar de no tener mal rendimiento solamente duró un año.
Para 2019, Sainz ya no tenía asiento con Renault. Entonces fue a McLaren, donde permaneció las últimas dos temporadas. Finalmente, para 2021, firmó con la Scuderia Ferrari para sustituir a Sebastian Vettel.
El madrileño afronta una nueva etapa en su carrera. Probablemente la más importante hasta ahora, será piloto de la Scuderia para las temporadas 2021 y 2022.
El nuevo compañero de Charles Leclerc, analizó su trayectoria, asegurando que la transición desde que salió de STR, hasta llegar a McLaren, pasando por Renault, fue algo caótico para él.
“Sinceramente, el único momento en la Fórmula Uno en el que mi carrera ha ido subiendo y bajando, fue cuando dejé Toro Rosso, para ir a Renault y luego a McLaren.
En 2017, me sentí como en casa en Toro Rosso y rendía a buen nivel. Luego surgió la oportunidad de Renault, y aun tenía contrato con Red Bull, fue una situación muy extraña».
En cuanto a su paso más reciente por McLaren, rescató que fueron años positivos, en los que el pensaba construir una relación a largo plazo:
«Fui a McLaren y pensé que pensé formar una relación a largo plazo con ellos. Disfruté mucho los dos años con el equipo. El segundo año vimos mejoras en comparación con el primero».
Aún sin haber comenzado su primera temporada con la Scuderia, ya se especula que Sainz será reemplazado por Mick Schumacher. Ferrari ha planeado desarrollarlo para el futuro, y es por eso, quizás, que Sainz está pidiendo un mejor contrato para el siguiente ciclo.
«Si hay algo que he aprendido, es la importancia de estar con un equipo por más de un año, tiempo para obtener el mejor potencial del auto y de las personas cerca de ti.
Permanecer en un equipo por un tiempo, ayuda con el rendimiento, te convierte en un piloto mejor y más rápido. La estabilidad también es mi objetivo con Ferrari, por eso firmé por dos años con ellos».
Para cerrar, Sainz recordó:
«Mientras estemos contentos el uno con el otro, será una nueva tendencia en mis contratos, no solo por un año, como ocurrió en Renault, no sabía que iba a pasar».
El reto que tiene Sainz por delante, no es cosa menor, y la exigencia estará al límite en Ferrari. Si lo que busca es estabilidad, la mejor forma de lograrla es con resultados, y demostrando en cada carrera que merece su lugar en la Scuderia.