El covid sigue afectando a gran parte del mundo y ni la Fórmula 1 se libra de ello. A pesar de que se ha avanzado en controlar esta terrible pandemia, en muchos aspectos sigue siendo un problema las restricciones entre países.
Es el caso del equipo Alpine, queha sufrido en primera mano las restricciones de movilidad entre países. En concreto entre Reino Unido y Francia. La marca construye sus motores en Enstone, en el país inglés, y sus motores de desarrollan en Viry-Châtillon en el país francés, suponiendo un problema de logística para Alpine.
Marcin Budkowski, director ejecutivo de la marca, ha explicado que este cierre de fronteras se ha visto reflejado en retrasos en la llegada de piezas. Produciendo un retraso en el intercambio de piezas entre fábricas.
«El cierre de fronteras ha creado problemas de logística también para nosotros. Esto ha supuesto retrasos en el envío de motores o piezas entre Viry y Enstone».
No solo ha ese problema en la llegada de piezas se han tenido que enfrentar. Hay que sumar el trabajo que hicieron una serie de ingenieros para hacer posible arrancar el motor del A521. Tuvieron que realizar una cuarentena estricta antes de trabajar en el proceso de arranque y el shake-down.
También Budkowski ha querido recalcar el sacrificio de estos ingenieros:
«El mayor reto ha sido preparar el encendido del motor y el shake-down. Esto se debe a que ingenieros de diferentes ingenierías y técnicas tenían que hacer cuarentena para poder hacer el shake-down, lo cual ha supuesto un nuevo contratiempo.»
Alpine no ha sudo el único equipo que ha sufrido este contratiempo con las fronteras, El equipo Haas también esta problemática con ingenieros del mismo tipo que Alpine. Para arrancar el coche debían de realizar una cuarentena estricta. Es por ello que el equipo americano ha decidido realizar el encendido del motor directamente en Bahréin.
Problemas de logística que han afectado a muchos equipos en sus planes de desarrollo.