Con las «nuevas» regulaciones aerodinámicas, que entraron en vigor para esta temporada, varios equipos han visto afectado su rendimiento. Especialmente los derivados del fondo plano y el difusor.
Según parece, estos cambios, han afectado especialmente a los monoplazas con un «rake» bajo. Como por ejemplo Mercedes y Aston Martin. Todo lo contrario que por ejemplo ocurre en Red Bull. Recordemos que por «rake» conocemos la diferencia de altura entre la parte trasera del monoplaza y la delantera.
Según los datos de varios equipos tras la cita de Bahréin, parece que los monoplazas con “rake” bajo han perdido un segundo por vuelta respecto a los de «rake» alto.
El tema del «rake» es algo que los equipos no pueden cambiar, para intentar recuperar algo de lo perdido debido a las estrictas reglas de homologación que limitan las actualizaciones de las principales piezas de los coches este año.
Todo ello ha puesto en pie de guerra a los equipos más afectados. Aunque es Aston Martin quien parece llevar la voz cantante. Otmar Szafnauer, ha expresado cierta inquietud por la forma en que la FIA introdujo las nuevas reglas.
En primer lugar por si realmente estos cambios fueron introducidos estrictamente por temas de seguridad. Y en segundo sobre si fue correcto que la organización de la F1, como titular de los derechos comerciales, estuviera involucrada en el proceso de cambiar las reglas de seguridad.
El jefe de Aston Martin pone en duda todo esto, y dice que tiene que hablar con la FIA, para poner algo de remedio a todo este asunto:
«El cambio de reglas se hizo solo por razones de seguridad, y eso depende únicamente de la FIA. Creo que lo correcto es hablar con la FIA y averiguar exactamente qué pasó y por qué. Entonces podremos ver si hay algo que se pueda hacer para que sea más equitativos todos estos cambios».
Szafnauer reconoce que parte del trabajo es suyo, pero que a la vez, la Federación debería pone de su parte.
“Creo que es lo correcto. Nosotros, como equipo, tenemos que trabajar duro para intentar recuperar todo lo que podamos. Pero al mismo tiempo, deberíamos hablar con la FIA para que sea un poco más equitativo».
El jefe de Aston Martin no descarta incluso emprender acciones legales si no se encontraba una solución al problema:
«Primero tenemos que hablar. Pero no puedo descartar que lo hagamos. Es difícil de predecir. Creo que lo correcto es ver qué se puede hacer».
Pero en el otro lado, tenemos a Red Bull. Su jefe de filas, Christian Horner se mostró muy sorprendido por estas declaraciones:
«Hay un proceso para introducir las posibles nuevas regla. Todas fueron votadas por unanimidad a través de las diferentes reuniones. Aston Martin o Racing Point habrían tenido que votar antes de pasar por la Comisión de la Fórmula 1 y el Consejo Mundial. Todas fueron aprobadas por unanimidad».
Horner asegura que en otras ocasiones, ellos han sido los afectados, y lo aceptaron. Para terminar tacha de ingenuos a Aston Martin por creer que sus quejas, van a cambiar algo:
«Cuando hubo un cambio en el alerón delantero hace unos años, eso nos perjudicó mucho. Votamos en contra, pero lo tuvimos que aceptar y trabajar para mejorar. Parece un poco ingenuo pensar que de repente se van a cambiar las reglas tras una sola carrera después de que se haya seguido todo el proceso. Me cuesta entenderlo».
Por otro lado, el otro gran equipo afectado, Mercedes, parece querer mantenerse al margen de todo eso. Al menos, eso parece tras las palabras de hoy de Toto Wolff:
«En este momento, no creo que sea correcto señalar con el dedo a alguien o algo. Así que prefiero no hablar de eso por ahora».
¿Nueva guerra a la vista?