Como ya os informamos en su momento y para evitar las diversas polémicas de los últimos años sobre posibles «trampas» de algunos equipos, la FIA, este 2021 a añadido un control adicional.
De esta manera, se selecciona un coche «al azar» al finalizar cada carrera del Mundial. La idea es realizar un exhaustivo examen de ese monoplaza. Incluso con la posibilidad de que haya un «desmontaje más profundo» de alguno de sus componentes internos. Con el fin de detectar posibles irregularidades que hasta ahora podían pasar por alto con las verificaciones ordinarias post carrera.
La Federación Internacional envió a los equipos una directiva técnica especificando todo este asunto.
El documento emitido, explica que la elección del coche y las piezas a comprobar no será fruto de alguna sospecha. Si no algo del todo aleatorio. Los equipos deberán tener a sus técnicos a disponibilidad de la FIA, para trabajar con los comisarios técnicos para proceder con el desmantelamiento.
Pues en la primera carrera de este año en Bahréin, el monoplaza «agraciado» fue el Mercedes de Valtteri Bottas. El W12 fue seleccionado porque fue uno de los coches que acabó la carrera y vio la bandera a cuadros entre los diez primeros. Concretamente terminando 3º.
El coche del finlandés fue desmontado y escrutado durante tres horas. Todo por el equipo de comisarios técnicos que dirige Jo Bauer.
Tras la revisión se comprobó que todos los componentes inspeccionados cumplían perfectamente con el reglamento técnico de la competición.
En el supuesto, de que en algún control, surja una duda sobre la legalidad de algo en el monoplaza, los comisarios están autorizados a sellar la pieza en cuestión, para conservarla con el fin de realizar nuevas mediciones o comparaciones posteriores.
Veremos a que monoplaza le toca en la cita de la próxima semana en Imola. Me tiro a la piscina, y digo que será un Ferrari…Acertaré?
Ruben Dario ALBARENQUE
11/04/2021 at 16:37
Que vale que lo examinen 24 horas, si no gana nunca ell de HAMILTON es el que tienen que revisar.