Sin lugar a dudas el principal protagonista del Gran Premio de España fue la estrategia, tanto para bien como para mal. Esta no fue la excepción para Fernando Alonso que venía de una buena calificación, partiendo en décimo lugar y con muchas ganas de mantenerse en la zona de puntos.
Pudimos constatar que el Alpine ha ido mejorando carrera tras carrera y tanto Fernando, como su compañero Esteban Ocon lo han aprovechado:
«Sigo aprendiendo cada carrera y fue un fin de semana positivo en cuanto a las prestaciones del coche. Es decir, no es que el coche fuese bien en Portugal porque fuese un circuito propicio para Alpine, en Barcelona también ha ido bien»
En cuanto a la estrategia del equipo Francés, fueron ambiciosos y optaron por ir a una parada para luchar por ese punto:
«Cuando quedaban 20 vueltas para el final, decidimos no parar, sabiendo que las últimas iban a ser vueltas con mucha acción. Y así fue. Al final por cinco o seis vueltas no mantuvimos ese punto. Salir tan atrás nos comprometió un poco la carrera desde el principio».
Un pelotón conformado por Sebastian Vettel, Lance Stroll, Lando Norris, Daniel Ricciardo y Pierre Gasly le pasaban por encima con neumáticos frescos. Mientras Alonso luchaba por mantenerse a tiro de DRS de George Russell:
«Tenía el parque de atracciones detrás de mí. Era mi estrategia, tener a Russell ahí, porque con el DRS de Russell igual manteníamos a todo el grupo, que tenían ruedas nuevas, detrás. Así que quería tenerle a un segundo, pero tampoco demasiado cerca. Cuando vi que le adelantaron, vi que ya éramos fruta madura, estábamos al caer, y así fue».
@AlpineF1Team
En Alpine se la han jugado a una parada y les costó caro, pues Fernando terminó en el puesto 17, sólo por delante de los Haas:
«Era una estrategia un poco suicida para intentar coger un puntillo, pero bueno, cuando no sale y pierdes un punto no te duele tanto. Hay que trabajar de cara a la siguiente, sobre todo en la posición de salida, porque sales más arriba y te evitas muchos de estos líos»
Lo que si hay que señalar es que el Asturiano se muestra positivo y reflexiona en cuanto a la lección que les ha dejado su desempeño en Catalunya:
«Bueno, no iba a sumar ningún punto porque de todas manera no estaba entre los 10 primeros, pero queríamos también ver cómo se comportaba el coche con otros neumáticos. Creo que fueron válidas esas tres vueltas al final para ver que no teníamos el balance justo tampoco ni siquiera con blandas.
En Barcelona hemos ido bien, pero eso no quita que me falte trabajo por hacer. En mi caso, aún más para intentar estar más arriba. Pero todo a su tiempo».
La próxima cita es en dos semanas en el legendario Gran Premio de Mónaco, un circuito en el que Fernando ha tenido grandes momentos.
