El GP de España estuvo marcado por la pugna entre Max Verstappen y Lewis Hamilton por la victoria. Pero llamó la atención la conversación del piloto británico en la que insinuaba que el alerón trasero del holandés era más flexible de lo permitido.
El heptacampeón puso algo de intriga sobre el rendimiento de Red Bull cuando sugirió durante el fin de semana que su rival podría estar obteniendo ventaja de la flexión de su alerón trasero en las rectas:
Y esa duda creada por Lewis y su equipo ha surtido efecto. La FIA ha comunicado a los equipos que antes del GP de Francia realizará un examen más exhaustivo a los alerones traseros de los equipos para comprobar que ningún equipo está haciendo uso indebido del reglamento.
El jefe de Red Bull, Christian Horner está tranquilo respecto al tema del alerón, ya que la FIA dio visto bueno a los test que hicieron:
«La FIA está completamente satisfecha con el coche, que ha superado todas esas pruebas que son bastante estrictas. Los coches son examinados a fondo con pruebas de flexión que tienen que pasar.»
Aunque la Federación Internacional del Automovilismo quiere dar cerrojazo al asunto y ha remitido una nueva directriz técnica en la que aunque es consciente de que todos cumplen la norma y que algunos alerones de flexionan a alta velocidad:
«Somos conscientes que los diseños cumplen con las pruebas actuales. No obstante, vemos deflexiones excesivas mientras los coches están en movimiento y creemos que tales deformaciones pueden tener una influencia significativa en el rendimiento del monoplaza”
La nota detalla las nuevas pruebas que se van a introducir y que se centran en las características de un ala que gira al revés a gran velocidad. Para la nueva prueba, la FIA se centrará en el comportamiento del ala cuando gira hacia atrás.
La esperanza es que las pruebas den respuesta contra los equipos que intentan superar los límites con diseños inteligentes que se mueven cuando están en la pista y de una manera que actualmente no se puede controlar cuando el coche está detenido.
Por último, Horner está con la mosca detrás de la oreja ya que en una conversación con Toto Wolff durante el fin de semana y cree que las declaraciones de Lewis sobre el alerón no vienen del propio campeón sino de su jefe de equipo, que utilizó a su piloto para dar voz a su opinión.